Malayerba: La roncha

Para Luisito, por sus cantos esperanzadores Le salió una roncha en la nalga derecha de tanto estar sentado. La hacía de taxista y de las veinticuatro horas que tiene el día, veinticinco se la pasaba frente al volante: peleando con esa dura transmisión, el nebuloso y lerdo tráfico y el pinche calorón. Lea: Malayerba: El […]

Malayerba: El coyote

Los policías lo sorprendieron en el ajetreo carnal, con una joven mujer. Traía los calzones abajo. La marea subía como la temperatura en sus cuerpos, casi al punto de inundarlos. Lea: Malayerba: El contador https://bit.ly/3iykGhz No vio venir a los agentes hasta que escuchó que le gritaban. El automóvil había quedado a un lado y […]

Malayerba: El contador

A Francisco y Susana, dueños de este muelle. De noche le habló. Te invito a desayunar. Órale. En qué restaurante. No. Qué restaurante ni qué nada: paso por ti a las seis. Y le colgó. Lea: Malayerba: Ese es https://bit.ly/39M3Mas Emprendió la reconciliación duradera entre los párpados. Se sumió en la cama algo intrigado. Pero […]

Malayerba: Ese es

Ese es. Dijo ella. Madre con heridas que ahondaron los surcos en la piel y oscurecieron el contorno de sus ojos: adiós al brillo, a la voz de terciopelo que abrazaba el patio y el lavadero mientras tendía la ropa, al buenos días musical de los vecinos al barrer la calle, y a todo, pero […]

Malayerba: Inteligencia militar

Con ese aspecto de indigente, cómo no iba a recogerlo. Le dijo compa, súbase, lo llevo. Pero el señor, que tenía una cara de hambre y mirada de perro chancualillo, contestó que no quería raite, sino comida. Igual lo hizo subir a la camioneta. Era una extralarga, doble cabina y blanca. Equipada con aire acondicionado […]

Malayerba El estudiante

Esa mañana llegó temprano. Pocas veces lo hacía. El vehículo júmer se subió al andador. Al mismo tiempo la banda tocaba Las mañanitas. Era el acceso principal de la Facultad de Derecho. Él mismo colocó una manta gigantesca que podía verse desde la calle: Felicidades Lupita. Así, sin signos de admiración. Tenía alrededor dibujos de […]

Malayerba: Chenchito

Es alburero y divertido. Inigualable combinación de la carpa más arrabalera con el comentario grotesco, directo, sádico. No hay que moverse ni distinguirse de los demás. Ahí en la cantina él es el dueño, el rey. Y bien puede trapearlo a uno entre sus albures. Nada más a los que se levantan para ir al […]

Malayerba: Reportero en apuros

Llegó hasta ahí como promotor de la Sedesol. Quién sabe cómo consiguió una cachucha con el logotipo de la institución y esa camioneta blanca que daba el gatazo. Estoy levantando un padrón para un nuevo programa, les dijo.Y se sentó en cuclillas, primero alrededor del fuego. Le sirvieron café y lo invitaron a pasar a […]

Malayerba: Los inversionistas

No eran cualquier inversionista. Entacuchados con ropa de etiqueta. Vehículos de buen gusto. Buenas formas al hablar. Nada de estridencias ni camisas de seda ni botas de piel exótica ni historias de balazos. Lea: Malayerba: Gracias a Dios https://bit.ly/2VTir0t Esos cuatro llegaron a Culiacán partiendo plaza. Buscaron ranchos, industrias, sociedades inmobiliarias, empresas constructoras, terrenos y […]

Malayerba: Gracias a Dios

Era tan temido que hasta los hermanos se le escondían: si viene a buscarme, no estoy. Pedían, rogaban, a los vecinos para que los escondieran y no ser encontrado por ese hombre que a sus veintitantos era un asesino sin reversa ni perdón. Presumía de sus saldos como quien celebra un diez en la escuela […]