El presidente Andrés Manuel López Obrador negó que su decisión de liberar a Ovidio Guzmán el 17 de octubre de 2019, haya sido por la presión que el Cártel de Sinaloa ejerció ese día, sino porque priorizó salvar vidas y evitar una masacre.
Durante la conferencia mañanera de este miércoles, el mandatario fue cuestionado sobre si la respuesta violenta del Cártel de Sinaloa para exigir la liberación del hijo de Joaquín el Chapo Guzmán durante el llamado “Culiacanazo”, influyó para que fuera dejado en libertad.
“No, no, eso ya lo he explicado varias veces… cuando me informan sobre como estaban las cosas, pues pienso en la vida de las personas, de la gente, y doy la instrucción de que lo liberen, para evitar una masacre y también pues una afectación a población inocente”, dijo.
Explicó que tras la captura de Ovidio Guzmán a mediodía, la reacción del grupo delincuencial, en este caso del Cártel de Sinaloa, fue movilizarse con “armas de alto poder, empiezan a agredir a unidades habitacionales de militares, secuestran a militares, se colocan en lugares estratégicos en Culiacán, interviene el Ejército y hay respuesta, incluso le pegan a un helicóptero, afortunadamente aterriza y se pone una barricada, en donde iba a haber una confrontación en plena ciudad, iba posiblemente a ocasionar la muerte de cientos de personas”, detalla.
“Yo no se que hubiese hecho otro gobernante, pero tengo mi conciencia tranquila”.
