La tarde del jueves 13 de enero la Secretaría de Salud de Sinaloa decidió cambiar los lineamientos bajo los cuales se reconocía como casos activos a aquellos pacientes con COVID-19. Este período se recortó a la mitad.

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Pasaron de ser 14 días desde la aparición de los síntomas a siete y de un porrazo los casos se desinflaron en la entidad. En menos de 24 horas en Sinaloa se pasó de tener alrededor de 5 mil 300 a mil 859 pacientes activos.

Un ejemplo lo ilustra María. Sus síntomas aparecieron el domingo 16 y para el lunes 17 se realizó una prueba la cual resultó positiva para el virus SARS-CoV-2 y con ello el inicio de su aislamiento y tratamiento.

Según el nuevo lineamiento implementado por Salud de Sinaloa, ella estaría dada de alta a partir del martes 25. Ese día la Secretaría reportó en el estado mil 343 casos activos. Ella, por añadidura, pasaría a la estadística de casos recuperados.

Sin embargo, la tarde del jueves 27 la Secretaría de Salud de Sinaloa dio marcha atrás y decidió “retomar” como casos activos a todos aquellos pacientes que duran 14 días desde el primer día de haber presentado síntomas y no siete días como lo venían manejando..

en ese lapso de dos semanas(entre el 13 y el 27 de enero) los casos activos en Sinaloa crecieron considerablemente, pasando de ser menos de 2 mil a más de 9 mil pacientes.

Eso se tradujo siempre en el reporte diario de nuevos contagios. En ese par de semanas Sinaloa registró 17 mil 686 nuevos contagios. La cifra crece mucho más si se le compara con los contagios reportados entre el 1 y el 12 de enero llegando a contabilizar 6 mil 111 casos en ese período.

Dicho en otras palabras, los contagios crecieron en casi un 200 por ciento en ese período.

El caso de mayor crecimiento es el de la capital del estado. Entre el 1 y el 12 de enero acumuló 2 mil 590 nuevos contagios y mientras que entre el 13 y el 27 de enero se registró 7 mil 586 lo cual es equivalente a más de un 200 por ciento.

La tendencia fue muy similar para los municipios que le siguen a Culiacán en cantidad de habitantes. Los casos de Ahome, Guasave y Mazatlán vieron incrementarse sus contagios diarios entre una y otra semana a más de un 150 por ciento.

Y este crecimiento se vio reflejado no sólo los casos activos sino también en hospitalizaciones y decesos. Después de no reportar casos día con día como activos debido a los nuevos lineamientos, la capacidad de camas de hospital comenzó a crecer y también los fallecimientos.

Para el jueves 13 de enero la Secretaría de Salud de Sinaloa tenía registro de un 90 por ciento de disponibilidad de camas para pacientes con el coronavirus. Según datos estatales se contaba entonces con 135 pacientes internados en alguna de las camas habilitadas para su atención.

El número creció en dos semanas. Para el jueves 27 de enero en Sinaloa ya estaban ocupadas 285 camas, es decir, los pacientes internados también se duplicaron.

El caso de mayor alarma son los fallecimientos. Entre el 1 y el 12 de enero la Secretaría de Salud apenas había reportado 26 muertes mientras que para el jueves 27 la cifra ya alcanzaba 144 decesos.

En ese rubro los datos siempre han estado con un notable desfase. Como ejemplo se toma el reporte del miércoles 26 de enero en que se notifican en plataforma 23 muertes, dos de ellas datan del 28 de diciembre y registradas de manera oficial cuatro semanas más tarde.

Otro fallecimiento reportado ese miércoles 26 de enero corresponde a un paciente de 38 años quien murió el lunes 24 y en el reporte no aparece como paciente de riesgo o con comorbilidad alguna.

El resto de los fallecimientos corresponden a fechas entre el 9 y el 24 de enero. Al corte del jueves 27 entre las variantes Ómicron y Delta han sumado casi 150 muertes durante enero para casi igualar a las 185 reportadas durante diciembre del año pasado.

Con estas cifras enero de 2021 significará un mes récord en Sinaloa tanto en contagios reportados como en promedio de pacientes activos con el coronavirus.

Al cierre de esta edición en el estado se han contabilizado 23 mil 797 nuevos contagios, de los cuales el 44 por ciento surgen en Culiacán, ambas cifras más grandes que las acumuladas en conjunto entre agosto y diciembre del año pasado.

Además, el estado registra al corte del 27 de enero 144 fallecimientos y un promedio diario de más de 2 mil 700 pacientes activos, este último con la salvedad de que durante dos semanas el reporte fue recortado al menos en un 60 por ciento.

Pero estas son las cifras de lo que ha significado el ascenso de la cuarta ola. En Sinaloa se espera al menos otro par de semanas con índices altos, luego la meseta y finalmente el descenso. Mientras tanto, pacientes en hospitales y decesos comienzan a crecer.

Artículo publicado el 30 de enero de 2022 en la edición 992 del semanario Ríodoce.