Especialistas sugieren que el fin de la pandemia de COVID-19 está cerca
La Cuarta Ola de COVID-19 en México, que tuvo su máximo pico en la segunda semana de enero, parece que comienza a ceder. Cifras preliminares muestran un descenso de casos de 38.93 por ciento.
De acuerdo a datos de la Secretaría de Salud Federal, en la semana 2 del año (9-15 de enero) se registraron 298 mil 175 casos, con cifras hasta el viernes 14, siendo el mayor pico de toda la pandemia, y una semana después se contabilizaron 182 mil 777, lo que significa 38.93 por ciento menos en comparación con la semana previa.
El pico de esta Cuarta Ola generada por la variante Ómicron, que inició en diciembre, fue 125 por ciento superior al de agosto de 2021 y 173 por ciento mayor que el de enero de este año.
La reducción de la semana 2, se mantiene en la semana 3 (16-22 de enero), de acuerdo a cifras preliminares, pues hasta el pasado jueves se reportaron poco más de 28 mil contagios.
El Instituto de Métricas y Evaluación de la Salud de la Universidad de Washington proyecta que para mediados de febrero, la cuarta ola habrá terminado en México y para marzo en la mayor parte de los países.
Salud Federal reporta que durante la Cuarta Ola, que inició en diciembre de 2021, se han registrado 913 mil contagios, es decir el 19.02 por ciento de los poco más de 4.8 millones de casos registrados desde el comienzo de la pandemia.
Aumentan hospitalizaciones, especialmente en menores
Aún cuando el número de hospitalizaciones ha sido menor al de las olas anteriores, en enero más de 23 mil personas fueron hospitalizadas debido al COVID-19, siendo la cifra más alta desde septiembre de 2021.
En comparación con diciembre, cuando se reportaron 8 mil 400 pacientes hospitalizados, el incremento en enero fue de 173 por ciento.
En enero de 2021, cuando predominaron los contagios por la variante Delta, se alcanzó un récord de 66 mil 500 personas hospitalizadas.
Contrario a las olas anteriores, en esta cuarta ola, el número de hospitalizaciones de menores de edad, es el más alto de toda la pandemia.
Del 1 de enero y hasta el día 27, 1 mil 795 menores de entre 0 y 17 años han sido hospitalizados debido a complicaciones del COVID-19.
La segunda cifra más alta de menores de edad que requirieron ser hospitalizados, fue de 1 mil 510 y se registró en agosto de 2021.
En septiembre de 2021 hubo 914 niños y jóvenes menores de 17 años hospitalizados, siendo la tercera cifra récord de toda la pandemia.
La Cuarta Ola no sólo registró un aumento de hospitalizaciones en menores de edad, sino que también en lo que va de enero más de 47 mil contagios han sido en este grupo de edad, y es también el mayor desde el inicio de la epidemia.
Hugo López-Gatell, subsecretario de Salud, afirmó el pasado viernes que hay un aumento de hospitalizaciones por COVID-19, y que el 78 por ciento de los pacientes no estaban vacunados.
Añadió que la pandemia está en una fase de “desaceleración”.
Prevén que el fin de la pandemia está cerca
Un artículo de Christopher JL Murray, director del Instituto de Evaluación y Métricas de la Salud (IHME) de la Universidad de Washington, publicado en la revista The Lancet, sugiere que el fin de la pandemia de COVID-19, está cerca.
En el texto titulado El COVID-19 seguirá pero el final de la pandemia está cerca, el especialista señala que estimaciones basadas en modelos del IHME sugieren que el 17 de enero de 2022 hubo 125 millones de infecciones de Ómicron por día en el mundo, que es más de 10 veces el pico de la onda Delta en abril de 2021.
“El nivel de infección sin precedentes sugiere que más del 50 por ciento del mundo se habrá infectado con Ómicron entre finales de noviembre de 2021 y finales de marzo de 2022”, indica.
“Aunque los modelos IHME sugieren que las infecciones diarias globales por SARS-CoV-2 han aumentado más de 30 veces desde finales de noviembre de 2021 hasta el 17 de enero de 2022, los casos informados de COVID-19 en este periodo solo han aumentado seis veces. Debido a que la proporción de casos asintomáticos o leves ha aumentado en comparación con las variantes anteriores del SARS-CoV-2 y que la tasa global de detección de infecciones ha disminuido a nivel mundial del 20 al 5 por ciento”.
Y añade: “Para marzo de 2022, una gran proporción del mundo habrá sido infectada con la variante Ómicron. Con los aumentos continuos en la vacunación contra el COVID-19, el uso en muchos países de una tercera dosis de vacuna y los altos niveles de inmunidad adquirida por infección, durante algún tiempo los niveles globales de inmunidad contra el SARS-CoV-2 deberían estar en su punto más alto. Durante algunas semanas o meses, el mundo debería esperar niveles bajos de transmisión del virus”.
Añade que los impactos de la transmisión futura del SARS-CoV-2 en la salud serán menores debido a la amplia exposición previa al virus, las vacunas adaptadas regularmente a nuevos antígenos o variantes, el advenimiento de los antivirales y el conocimiento de que los vulnerables pueden protegerse a sí mismos.
“Durante olas futuras cuando sea necesario usando máscaras de alta calidad y distanciamiento físico, el COVID-19 se convertirá en otra enfermedad recurrente que los sistemas de salud y las sociedades deberán gestionar… La era de las medidas extraordinarias de gobiernos y sociedades para controlar la transmisión del SARS-CoV-2 habrá terminado. Después de la ola de Ómicrones, volverá el COVID-19 pero no la pandemia”.
Artículo publicado el 30 de enero de 2022 en la edición 992 del semanario Ríodoce.