La sicosis de los jales tóxicos

LIMPIEZA. Empleados de la mina limpian el agua de desechos derramados.
LIMPIEZA. Empleados de la mina limpian el agua de desechos derramados.

Descubren lluvias intensas una “veta” de miedo por contaminación en Sonora
Una quebradora de quijada, dos quebradoras de cono, cuatro bandas transportadoras y una criba vibratoria, de la Mina de Beneficio Santa Rosa, de la Mina Dos Señores, S.A. de C.V., pararon de triturar el arsenal de material metalúrgico para extraer oro y plata, dejando al descubierto una nueva “veta” de sicosis por las alertas de supuestos jales tóxicos.
La Planta Santa Rosa tiene dos años trabajando en esa zona serrana, en donde emplea a los habitantes de los pueblos aledaños de Pánuco, Concordia.
Alrededor de 160 trabajadores mineros originarios de Copala, Pánuco, Las Juntas, La Guayanera, Mesa del Carrizal, Capilla del Taste y Santa Lucía, entre otros, temen convertirse en desempleados si se cierra la empresa minera.
El jueves 9 de octubre, a las siete de la mañana, ocurrió no solo el derrame de 10 mil 800 toneladas de jales de la Planta Santa Rosa, de la Mina Dos Señores, S.A de C.V., sino el desbordamiento de la sicosis por el derrame de químicos ocurrido en la mina de Buenaventura, Sonora. Algunos pobladores de la zona de Pánuco comentaron que las lluvias habían sido intensas y minaron la tierra de préstamo de la presa que contenía los jales de deshecho de la empresa minera.
Desde que se derramó la información periodística de que los jales eran tóxicos, el arroyo Pánuco se transformó en pánico de los consumidores del agua, pero el peligro real fue para los que estuvieron a punto de ser sepultados.
“Escuchamos un tronidazo, y es que el señor es muy grande y le hace el paro a uno, si no…”, dijo Antonio Quintero, de 75 años de edad, que tiene su vivienda junto al arroyo Pánuco y cerca de la presa que se deslavó y derramó los jales.
Antonio Quintero se refería al peligro en el que se vieron su esposa y él, de ser sepultados en vida por la montaña de jales que debido a que la tierra de préstamo que contenía el material de deshecho minero, se derrumbó.
La carretera accidentada que conduce hacia el poblado de Pánuco, enclavado en lo intricado de la sierra del municipio de Concordia, había bloqueado el paso a los vehículos y los empleados de la mina limpiaban los jales derramados.
PSICOSIS COLECTIVA. Por la reciente contaminación en Sonora.
PSICOSIS COLECTIVA. Por la reciente contaminación en Sonora.

El ensayador químico
“Lo de los jales tóxicos es una mentira que es comprensible por la ignorancia de la gente, y poco a poco se ha ido disipando, pero los funcionarios afines a la corrupción van a sacar raja y con ese pretexto, los apoyos mineros van llegar a los privilegiados de siempre”, opinó un viejo químico metalúrgico ensayador de “jales” que pidió no mencionar su nombre por temor a represalias.
“Está por verse si también los laboratorios “ABC, Química, Investigación y Análisis”, no saca raja con las pruebas que le encargaron, por esta veta de sicosis de los jales tóxicos que se ‘descubrió’ la semana antepasada”, añadió el químico metalúrgico mazatleco.
SATURNINO MONTAÑO: “Los derrames no son tóxicos”.
SATURNINO MONTAÑO: “Los derrames no son tóxicos”.

El ingeniero metalúrgico
—¿A qué le atribuye usted la alarma causada por derramamiento de jales? —se le pregunta a Saturnino Montaño Ornelas, ingeniero metalúrgico y administrador de la Planta Santa Rosa.
—Es a la falta de información. Uno nomás se preocupa por decir: me voy a casar o mi hija cumple quince años, le voy a comprar un collar de oro, unos aretes de oro o voy a llevarle algo de plata. Pero nunca saben de donde vienen el oro y la plata, y qué proceso se necesita para sacar el oro y la plata. ¿De dónde viene el oro?, no pues de una mina, pero piensan que de la mina sacan así el oro amarillo y la planta blanca. Pero no saben que es un proceso largo.
Ese día, el ingeniero metalúrgico se quejaba de algunos medios de comunicación, que sin tener pruebas químicas de la calidad del agua, habían afirmado que los jales eran tóxicos, por lo que el administrador de la Planta Santa Rosa, intentaba ser prudente en sus declaraciones a los reporteros.
—¿Cuántos años tiene de experiencia en esto del derramamiento de jales?.
—Mire yo terminé de estudiar en 1979 antes de Cristo.
—¿Esto que pasó es una experiencia nueva para usted?
—Fíjese que es segunda vez.
—¿Dónde fue la otra experiencia?
—Allá en Nayarit.
—¿Qué le pasó a la presa allá en Nayarit?
—Lo que le pasó a aquella presa es que llegó un raudal de agua, que nosotros teníamos desviándola por dos salidas y en medio quedaba la presa. Entonces toda el agua de varios años tenía salidas, tenia desagüe. Pero esa vez se taparon los desagües con palizadas y todo, y en lugar de salir por los desagües, entró al vaso.
—En qué parte de Nayarit?
—En El Zopilote, Nayarit.
—¿Y ahí también sacaban oro y plata?
—Sí, pero con cianuro.
SIN ACTIVIDAD. La mina paró su actividad por el derrame de jales.
SIN ACTIVIDAD. La mina paró su actividad por el derrame de jales.

Supervisión permanente: SEMARNAT
A Jorge Abel López Sánchez, delegado de la Semarnat en Sinaloa, se le preguntó qué lección dejaba el derramamiento de jales en el arroyo Pánuco, para que no volviera a darse un problema de esa naturaleza.
“Bueno, respondió, hay un programa permanente anunciado por el secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), Juan José Guerra, a raíz del incidente de Sonora, que consiste en una supervisión y sobre todo vigilancia permanente a todas las minas del país. La delegación de PROFEPA en Sinaloa está haciendo lo conducente, está cumpliendo con su responsabilidad. Entonces lo que nos resta a todos es que cada quien cumpla con su responsabilidad. Las empresas cumplir con lo que establece la normatividad en base al resolutivo que se les otorga, y PROFEPA de vigilar que se cumpla con la misma y se aplique la normatividad”.
En los ajetreos de la supervisión que realizó el delegado de SEMARNAT donde fue el incidente minero, Jorge Abel López Sánchez resbaló y sufrió raspaduras con las piedras en su tobillo del pie derecho. Se sentó en una piedra, se quitó los zapatos y los calcetines para hacer una valoración ocular de las heridas. Momentos después, alguien bromearía que el exalcalde de Mazatlán quería hacer la prueba del “calcetinazo” a la calidad de agua con jales, aludiendo a cómo ganó la presidencia municipal del puerto al Partido Acción Nacional, con el tema del agua “chocolatosa” que proveía la JUMAPAM a los usuarios de dónde había sido gerente su contrincante político Salvador Reynosa, candidato panista a la alcaldía en 2008.

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