Culiacán, sigue siendo la ciudad con mayor número de casos

Con poco menos de 3 mil contagios de COVID-19 reportados durante marzo de manera oficial por la Secretaría de Salud local, en Sinaloa la pandemia experimenta un descenso considerable.

El escenario posterior al Carnaval Internacional de Mazatlán no dejó una escalada, y por el contrario, aunque leve, la baja en los casos se ha mantenido.

En total se reportaron 2 mil 981 casos durante marzo, que equivalen a un promedio de 96 contagios cada 24 horas en el estado, siendo Culiacán la ciudad que sigue concentrando la mayor parte de los pacientes con el coronavirus.

La capital del estado registró durante los 31 días del mes mil 117 nuevos casos para un promedio diario de 36 contagios.

Si las cifras del estado las comparamos con el mes inmediato anterior, son casi cinco veces menos casos de diferencia entre marzo y febrero de este año, es decir, los casos se redujeron casi en un 82 por ciento.

La única cifra que se mantiene elevada en el estado es la de casos sospechosos. Sigue por encima del promedio diario de 2 mil 300. Además la tasa de positividad durante marzo quedó en casi 50 por ciento.

El año pasado en este mismo periodo la tasa de positividad era apenas superior al 40 por ciento, sin embargo la estadística puede no ser muy relevante debido a la baja cantidad de pruebas que se realizan en el estado.

Además, los fallecimientos si bien se siguen registrando, sí ha habido una ligera baja, al menos en la estadística oficial, aunque siempre con rezagos a cuentagotas durante los reportes diarios.

Marzo registró en plataforma 116 fallecimientos con más del 80 por ciento de ellos ocurridos durante ese mes, mientras que el resto ocurridos durante 2021 pero reportados hasta entonces de manera oficial en la estadística.

Si se toma como parámetro el total de fallecimientos reportados durante marzo, el promedio diario quedaría en cuatro fallecimientos. Sin embargo esta cifra ilustra muy poco debido al constante rezago en el registro de muertes por parte de la Secretaría de Salud de Sinaloa.

En total, el primer trimestre del año deja 46 mil 218 casos de COVID-19, lo cual significa que en ese lapso se registraron el 37.82 por ciento de los contagios reportados de manera oficial en 25 meses de pandemia.

Además los decesos reportados de manera oficial también son considerables. Durante el primer trimestre de este año el COVID-19 ha cobrado la vida (según los registros oficiales) de 645 personas, que significa un 6.62 por ciento de las muertes reportadas en 25 meses.

La diferencia con respecto a 2021 es notable. En el primer trimestre de ese año se contabilizaron 8 mil 672 casos y mil 093 decesos. La enfermedad no tuvo un crecimiento tan grande como hoy día, pero también había mayor letalidad. Las vacunas han sido importantes.

Según los datos de la Secretaría de Bienestar en Sinaloa se han aplicado 5 millones 184 mil 388 dosis de la vacuna contra el COVID-19, dispersadas entre primeras y segundas dosis, así como de refuerzo, junto a las aplicadas a adolescentes entre 15 y 17 años.

Según esta estadística se tienen a 2 millones 193 mil 659 personas vacunadas con al menos una dosis. La meta es de 2 millones 364 mil 496.

Al corte del 30 de marzo en Sinaloa un millón 969 mil 533 personas contaban con esquema completo de vacunación, lo que equivale al 89.78 por ciento, según las cifras que maneja la institución.

Y mientras que los datos de Bienestar presumen altos porcentajes en primeras y segundas dosis entre los sectores de la población, es en las dosis de refuerzo las que están muy por debajo de la meta esperada, todos por debajo del 70 por ciento.

Camas vacías

Las más de mil 500 camas habilitadas para pacientes con el coronavirus en Sinaloa se han pasado este trimestre desocupadas en su gran mayoría. El mayor crecimiento se experimentó a mediados de enero con una ocupación del 16 por ciento.

La mayor cantidad de pacientes fueron una vez más en Culiacán, Ahome, Guasave y Mazatlán.

Y la explicación se ilustra en la estadística oficial. Durante las primeras semanas del año los casos comenzaron a dispararse gracias a la presencia de la variante Ómicron y pasaron en menos de dos semanas de menos de 120 a más de 5 mil contagios cada 24 horas.

La línea roja ilustra un enorme pico entre las semanas 2 a la 7 y a partir de la semana 13 la estabilización. El pico más alto tuvo una subida súbita y una bajada muy similar.

Sin embargo ello no generó desbordamiento en las atenciones médicas como en las olas anteriores.

Por poner un ejemplo, en Culiacán el Hospital General Regional número 1 del IMSS tiene apenas seis pacientes internados por COVID-19 en alguna de las casi 300 camas habilitadas para su atención.

A pesar del gran incremento de casos de COVID-19 durante el primer trimestre del año, la capacidad hospitalaria se ha mantenido holgada. La siguiente aduana será sortear la Semana Santa y eventos que se deriven de dicho periodo de asueto.

Artículo publicado el 03 de abril de 2022 en la edición 1001 del semanario Ríodoce.