Gregorio Sánchez Hernández, director corporativo de Negocios de Banco Inmobiliario Mexicano (BIM), declaró que el llamado “superpeso” ha aumentado en un 30 por ciento la adquisición de vivienda y complica la inversión tanto nacional como extranjera en este sector.
BIM es una institución financiera especializada en operaciones bancarias a través de la inversión inmobiliaria, y este jueves durante una reunión en Culiacán, mostró en números rojos el tipo de cambio en el actual sexenio, aludiendo que es el peor activo para invertir.
“Desde hace más de 20 años que no veíamos una tasa real tan alta como la actual”, se leyó en su exposición.
“El superpeso ha jugado en contra de la parte inmobiliaria, sobre todo en las zonas del país que están más dolarizadas, que tienen que ver con el sector turismo. Se ha estado incrementando a la gente que viene del extranjero a comprar a México, aproximadamente en un 30 por ciento (la adquisición de viviendas)”, declaró Sánchez Hernández.
Detalló que las ciudades que más se han visto afectadas con este incremento han sido las fronterizas como Tijuana y Mexicali; y aquellas dedicadas al sector turístico como Cancún, Tulum y Puerto Vallarta.
El directivo del BIM focalizó el problema en la afectación a la inversión extranjera, aún cuando se extiende en lo nacional, con una inflación inestable y un poder adquisitivo que disminuye.
“Una inflación que todavía no está estable y baja, que es un tema que pega en el bolsillo de todos.
éxico ha mantenido afortunadamente sus tasas de interés, pero lo que no se ha mantenido, es más ha disminuido, es el poder adquisitivo”.
Francisco Pacheco Carrillo, director regional de la zona noroeste del mismo banco, mencionó que la población tiene también la necesidad de viviendas con interés social y que, acorde al proceso electoral que se lleva a cabo, espera que los candidatos a la presidencia de la República tengan un proyecto enfocado en ese tema.
“Sí hay una necesidad muy importante, que es la vivienda social, pero también hay que tomar muy en cuenta que el incremento de los precios de la construcción, como las mismas tasas de interés, están contrayendo mucho la construcción de ese tipo de viviendas porque los márgenes de utilidad de las empresas no están dando para atender ese nicho social”.
