Patrick J. Lechleitner, director adjunto del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos (ICE), reveló que en la ‘Operación Paisano”, para detener a los que consideran líderes del Cártel de Sinaloa participaron áreas de inteligencia estadounidenses

Al menos durante los últimos siete años, las áreas de inteligencia de Estados Unidos operaron en México para capturar primero a Joaquín el Chapo Guzmán y después a su hijo Ovidio Guzmán López, a través de la llamada “Operación Paisano”.

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Patrick J. Lechleitner, director adjunto del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos (ICE), confirmó en una carta enviada el 9 de agosto de 2023 al senador estadounidense Charles E. Grassley, que la oficina de Investigaciones del Departamento de Seguridad Nacional (Homeland Security Investigations o HSI) ha tenido presencia en México durante años, colaborando en las investigaciones que permitieron la detención de los que consideran los cabecillas del Cártel de Sinaloa.

En la relatoría, Lechleitner detalla que a través de la “Operación Paisano” se logró la detención del Chapo Guzmán, —el 8 de enero de 2016 en Los Mochis—, y se realizaron los operativos para capturar a Ovidio Guzmán, el 17 de octubre de 2019 y el 5 de enero de 2023, conocidos como “culiacanazos”, pese a que el presidente Andrés Manuel López Obrador ha negado en reiteradas ocasiones que EU haya tenido alguna participación.

En 6 de enero de 2023, un día después de la detención de Ovidio en la sindicatura de Jesús María, perteneciente al municipio de Culiacán, López Obrador fue cuestionado sobre si agencias estadounidenses participaron en alguna etapa del operativo, y lo negó: “no, esta es una decisión que se toma y les diría que es de rutina (en el Gabinete de Seguridad)”.

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“Actuamos con autonomía, con independencia, sí hay cooperación y la va a seguir habiendo, pero las decisiones las tomamos como gobierno soberano, independiente y estas decisiones pues las tomamos en el Gabinete de Seguridad”, dijo en esa ocasión.

Marcelo Ebrard, entonces secretario de Relaciones Exteriores, también rechazó cualquier participación de Estados Unidos.

Pero no sólo la oficina de Investigaciones del Departamento de Seguridad Nacional (HSI) ha estado operando en México para capturar a cabecillas del narcotráfico, sino que, en abril pasado, la Administración para el Control de Drogas (DEA por sus siglas en inglés) dio a conocer que desde mediados de 2021 se infiltró en la red de la facción de Los Chapitos y el Cártel de Sinaloa, obteniendo un “acceso sin precedentes a los niveles más altos de la organización”.

Y en marzo de 2022, el ex fiscal de Estados Unidos, William Barr, dijo en una entrevista con Fox News, que en el primer “Culiacanazo”, agentes de la DEA estuvieron presentes en el fallido operativo para capturar a Ovidio Guzmán en 2019.

“Cuando intentamos arrestar al hijo del Chapo, llegaron 700 tropas paramilitares, con metralletas calibre 50 montadas en las cajas de las camionetas, y el ejército se retiró”, dijo Barr.

La DEA también afirmó que participó en la captura de Rafael Caro Quintero, el 15 de julio de 2022 en el municipio de Choix.

“Hoy, nuestro increíble equipo de la DEA en México trabajó en conjunto con las autoridades mexicanas para capturar y arrestar Rafael Caro Quintero, acusado en Estados Unidos de la tortura y asesinato del agente especial de la DEA Kiki Camarena y con muchos otros delitos”, señala un mensaje firmado por Anne Milgram, publicado en el sitio oficial de la DEA el 16 de julio de 2022.

“Durante más de 30 años, los hombres y mujeres de DEA han trabajado incansablemente para llevar a Caro Quintero ante la justicia. El arresto de hoy es el resultado de años de sangre, sudor y lágrimas, sin su trabajo, Caro Quintero no enfrentaría la justicia”, añade.

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Semanas antes de que se registrara el primer “Culiacanazo”, para detener a Ovidio en octubre de 2019 en el Desarrollo Urbano Tres Ríos en Culiacán, Ríodoce publicó que Uttam Dhillon, director de la DEA, había estado en Culiacán y se reunió con el entonces gobernador Quirino Ordaz Coppel. Posteriormente una comitiva de fiscales y agentes antidrogas estadounidenses visitaron varios narcolaboratorios en la sierra de Sinaloa. Luego de eso se realizó el fallido operativo para detener al Ratón.

La frustrada detención de Jesús Alfredo Guzmán

En diciembre de 2020, se aprobaron reformas a la Ley de Seguridad Nacional, propuestas por López Obrador para regular y limitar la actuación dentro del país de los agentes extranjeros de agencias como la DEA, CIA y el FBI. La iniciativa fue presentada luego del roce diplomático por la detención del general Salvador Cienfuegos, extitular de la Sedena, el 15 de octubre de 2020 en Los Ángeles.

Hasta el momento se ignora cómo las reformas a la Ley de Seguridad Nacional han regulado el trabajo de las agencias de inteligencia estadounidenses en territorio mexicano, pero lo cierto es que estas han continuado operando e incluso han participado directamente en operativos, como lo afirmó el ex fiscal de EU, William Barr, en el caso del primer “Culiacanazo”.

La carta enviada por Patrick J. Lechleitner, director adjunto del ICE, al senador Charles E. Grassley, es una respuesta a una misiva enviada por el segundo a las diferentes áreas de inteligencia estadounidenses, en la que solicita información sobre las investigaciones de la facción de Los Chapitos, el Cártel de Sinaloa y la red de distribución de fentanilo, a partir de una supuesta rivalidad entre agencias, y que habría llevado a que la DEA interviniera al menos en dos ocasiones para evitar que fuera detenido Jesús Alfredo Guzmán Salazar.

Grassley reclama que mientras al Senado se le negó dicha información, agentes de la DEA la entregaron a medios de comunicación como el New York Times.

“Según se informa, la infiltración de la DEA (en la facción de Los Chapitos) también detuvo las operaciones de arresto de Los Chapitos en más de una ocasión. Los registros obtenidos por el Times muestran que en mayo de 2022 el Departamento de Justicia dijo a los agentes federales que “renunciaran” a su operación de arresto contra uno de Los Chapitos, Jesús Alfredo Guzmán Salazar (“Alfredo”), a solicitud de la DEA”, señala el senador en una misiva fechada el 9 de mayo de 2023.

“Se necesitan aproximadamente seis meses de vigilancia y planificación para arrestar a un líder de un cártel. Los agentes federales habían seguido minuciosamente a Alfredo hasta un lugar en el estado de México occidental, Sinaloa cuando, según informes, el Departamento de Justicia detuvo las operaciones de arresto. Tres fuentes confirmaron esta orden de retirada, y como resultado de la orden, Alfredo no fue arrestado y permanece en libertad para seguir inundando a los EU con fentanilo”.

Añade que el Departamento de Justicia supuestamente detuvo las operaciones del FBI y el HSI para arrestar a Jesús Alfredo Guzmán en una segunda ocasión en la primavera pasada, también por petición de la DEA.

El senador Grassley señala que sólo obtuvo una respuesta parcial de las agencias de inteligencia, es decir la carta de Patrick J. Lechleitner, quien habló a nombre del Departamento de Justicia (DOJ).

En la misiva Lechleitner le confirma al senador que la oficina de Investigaciones del Departamento de Seguridad Nacional (HSI) encabezó exitosamente la “Operación Paisano”, que permitió la aprehensión de Joaquín el Chapo Guzmán en 2016, condujo a acusaciones federales y condenas de múltiples delincuentes de alto nivel relacionados con drogas y que testificaron en el llamado “Juicio del Siglo” en 2018 y 2019 en Brooklyn, Nueva York.

Añade que el operativo también llevó a los dos arrestos de Ovidio Guzmán López el 17 de octubre de 2019 y el 5 de enero de 2023.

“La ‘Operación Paisano’ condujo al arresto en octubre de 2019 de Ovidio Guzmán López en Culiacán, Sinaloa, México, por autoridades mexicanas que trabajan en conjunto con las oficinas de HSI en México. Tras su arresto, los hermanos de Ovidio organizaron ataques coordinados con pistoleros del cártel contra el Ejército mexicano para obligar al gobierno a liberarlo, un evento de alto perfil conocido como la ‘Batalla de Culiacán’ o el ‘Culiacanazo’, que dejó al menos 12 muertos. El presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador ordenó la liberación de Ovidio ese mismo día. Este envalentonó a los Chapitos y los estableció como prominentes narcotraficantes y líderes del cártel ejerciendo una influencia significativa sobre la actividad criminal en EU y México”, señala Lechleitner.

“El 14 de diciembre de 2022, los fiscales federales obtuvieron una acusación conjunta y sustitutiva contra los cuatro Chapitos que incluía cargos por 36 violaciones…, que conlleva una posible pena de cadena perpetua. La evidencia obtenida de la ‘Operación Paisano’ supone 11 de las 36 violaciones. Y el 5 de enero de 2023, HSI coordinó exitosamente con sus contrapartes mexicanas la detención de Ovidio Guzmán López en Jesús María, Sinaloa, México”.

Añade que actualmente el HSI sigue “apuntando” a miembros del Cártel de Sinaloa, incluidos los integrantes de la facción de Los Chapitos, “HSI está comprometido a llevar a cabo investigaciones conjuntas con sus socios federales, estatales, locales, tribales e internacionales, lo que garantizará un éxito óptimo en nuestras misiones compartidas y objetivos comunes”.

Artículo publicado el 10 de septiembre en la edición 1076 del semanario Ríodoce.