Del 1 al 7 de agosto se celebró la semana mundial de la lactancia materna. Se trata de una campaña mundial para crear consciencia y fortalecer todo lo bueno relacionado con esta beneficiosa práctica alimenticia.
La lactancia materna es reconocida como el mejor alimento posible para niños y niñas dentro de sus primeros seis meses de vida, proporciona todos los nutrientes necesarios para que el bebé crezca y desarrolle su sistema inmunológico de manera adecuada.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) y Unicef recomiendan que se mantenga la lactancia materna de manera exclusiva durante los primeros seis meses de vida. Esto significa que el bebé solo será alimentado leche materna y ningún otro alimento sólido o líquido, con excepción de soluciones hidratantes o medicamentos; esta deberá iniciar en la primera hora después del parto y a libre demanda, es decir, cada que el lactante pida.
En México, uno de cada tres bebés es alimentado exclusivamente con leche materna. La mayoría reciben alimentación complementaria, como fórmula, leche de vaca o bebidas azucaradas.
Beneficios para la madre
Practicar la lactancia materna no solo trae beneficios al bebé sino también a la madre. Esta ayuda a la recuperación más rápida del parto, disminuyendo el riesgo de hemorragia y depresión postparto.
A largo plazo disminuye las probabilidades de desarrollar distintos tipos de cánceres como el de ovario o de mama, también contribuye como protector contra enfermedades como diabetes tipo 2, enfermedad cardiaca, hipertensión, anemia y osteoporosis.
Mitos comunes
A pesar de todos los beneficios probados alrededor de la lactancia materna, existen mitos que persisten, y que suelen socavar en algunos casos la intención de amamantar de manera natural.
Dar pecho duele y lastima los pezones
A decir de la experta Catriona Waitt, profesora de la Universidad de Liverpool, esto es complicado de afirmar. Si bien las molestias y dolores al principio son normales, no debería de causar dolor severo.
Las molestias pueden ser normales, especialmente en madres primerizas, pero si los dolores son muy fuertes puede ser indicativo de que el bebé no está agarrando adecuadamente el pecho.
No se pueden tomar medicamentos durante la lactancia
Esta una de las principales dudas al momento de iniciar la lactancia. Algunos medicamentos llegan al bebé en pequeñas cantidades. Regularmente no hay inconveniente con la mayoría de los medicamentos, pero es el doctor quien deberá indicar si es seguro dar pecho al mismo tiempo que se toma un tratamiento médico.
Por lo general, los medicamentos con restricciones para la lactancia son aquellos que se usan para tratar complicaciones mayores, como el cáncer.
Es importante considerar que los remedios herbolarios no son una mejor alternativa que la medicina regular, pues en muchos de ellos no se sabe a ciencia cierta qué es lo que contienen o en qué cantidades.
En la página e-lactancia.org puede consultar la compatibilidad de su medicamento con la lactancia materna. Una consulta sencilla le dirá si la sustancia activa es de riesgo muy bajo, bajo, alto o muy alto para ser compatible con esta forma de alimentación.
Comer alimentos poco condimentados y poco picante
La profesora Waitt afirma que no hay nada que no se pueda comer en la lactancia. Sin embargo, la calidad de la leche se ve afectada por la dieta de cada mamá.
Es posible que se noten algunos patrones, como que después de algunos alimentos el bebé se pone irritable, pero no hay nada dañino o médicamente incorrecto en los condimentos o lo picante.
Si se amamanta por más de un año, va a ser difícil destetar
La misma OMS recomienda el pecho durante los primeros seis meses, y luego introducir alimentación complementaria, pero continuando con el pecho hasta que se desee. No existe una indicación temporal recomendada.
Uno de los principales problemas por los que se interrumpe la lactancia materna en la actualidad es la limitada licencia de maternidad. Las mamás en vida laboral se ven obligadas a volver a sus labores donde las condiciones para extraer y almacenar leche no son las ideales, condicionando la continuidad de la alimentación exclusivamente materna.
Artículo publicado el 27 de agosto de 2023 en la edición 1074 del semanario Ríodoce.