La Organización de Países Exportadores de Petróleo advirtió de los riesgos bajistas para la demanda de crudo en el verano boreal por el impacto de los recortes de producción anunciados por los integrantes de la organización y sus aliados el pasado 2 de abril, aunque el grupo mantuvo su previsión de crecimiento de la demanda petrolera mundial en 2023.
Según el informe mensual de la OPEP, la demanda aumentará en 2.32 millones de barriles diarios (bpd), es decir, un 2.3%. Esta previsión no ha variado respecto a la del mes pasado.
La OPEP, Rusia y otros aliados, conocidos como OPEP+, sorprendieron al mercado el 2 de abril con el anuncio de nuevos recortes de los objetivos de producción, que se suman a los ya vigentes.
El precio del petróleo ha subido hacia los 87 dólares el barril desde la decisión, desde menos de 80 dólares.
En un debate sobre las perspectivas del mercado para el verano boreal, la OPEP señaló que el habitual repunte estacional de la demanda estadounidense podría verse afectado por la debilidad económica debida a la subida de las tasas de interés, y que la reapertura de China aún no había frenado el descenso del consumo mundial de crudo refinado.