Ricardo Anaya Cortés, señaló que el presidente Andrés Manuel López Obrador se cree “emperador”, y cuestionó el “ninguneo” del jefe del Ejecutivo Federal a los poderes Legislativo y Judicial, aludiendo a la ceremonia de aniversario de la Constitución.
“Ni el día que se celebra la Constitución la quiere respetar”, sentenció el panista sobre la polémica por la ubicación que dieron a la presidente de la Suprema Corte, Norma Piña, así como al presidente de la mesa directiva en la Cámara de Diputados, Santiago Creel, concediendo los lugares junto a él, al secretario de Gobernación, Adán Augusto López y los altos mandos militares.
“Tenemos un presidente que simple y sencillamente no respeta la ley. La raíz, la causa de gran parte de los errores que comete López Obrador es la creencia que salió cuando dijo `no me vengan con ese cuento de que la ley es la ley´”, expresó.
Apenas la semana pasada, Ricardo Anaya reapareció en actividades públicas al acompañar al actual dirigente nacional del PAN, Marko Cortés, en una gira con comunidades migrantes, en Estados Unidos.
Tenemos un presidente que se cree emperador. Por eso vive en un palacio y dice “no me vengan con que el cuento de que la ley es la ley.” Por eso ningunea al Legislativo y al Judicial.
— RicardoAnayaC (@RicardoAnayaC) February 13, 2023
Ojalá entendiera que la ley es la medida, el diálogo el camino y la unidad el motor. pic.twitter.com/gWLBKXWPuY
“A cuatro años de ser presidente, López Obrador no entiende que no es un emperador, no lo entiende y por eso se rodea de sus generales; no lo entiende y por eso se fue a vivir a un palacio, mil veces más lujoso que lo que eran ‘Los Pinos’ y quizás lo más grave es que a cuatro años de ser presidente, no entiende que es presidente de todas y todos los mexicanos”, consideró.
Abordó además, las expresiones del presidente sobre las descalificaciones a la clase media y a los profesionistas, calificándolos de aspiracionistas tras perder la mitad de las alcaldías capitalinas; a su juicio, López Obrador sólo gobierna para los suyos y los que reciben ayudas, pero añadió, no lo hace por “verdadera convicción” y concluyó.