El expresidente de Egipto, Hosni Mubarak, falleció a los 91 años, por lo que el gobierno de ese país decretó este martes tres días de luto.

El dictador había presentado problemas de salud luego de ser sometido a una cirugía.

El luto entrará en vigor a partir de mañana, cuando se espera que sea enterrado el hombre que gobernó con puño de hierro el país entre 1981 y 2011.

Aún no se ha informado oficialmente sobre el funeral, pero medios locales especulan con que puede tener carácter militar y podría tener lugar este miércoles, informó Efe.

Mubarak había sido sometido en enero a una operación y permanecía hospitalizado afectado por dolencias en su aparato gastrointestinal.

El dictador Hosni Mubarak gobernó Egipto desde que asumió la Presidencia en 1981 tras el asesinato a manos de extremistas de su antecesor, Anuar al Sadat, hasta que fue forzado a abandonar el poder el 11 de febrero de 2011 tras 18 días de acampada de protestas en las calles del país.

Después de la revuelta popular, el derrocado Presidente fue juzgado por la muerte de cerca de un millar de manifestantes en la represión de las manifestaciones en su contra, pero finalmente fue declarado inocente por ese delito en 2014.

Desde que fue excarcelado, llevaba una vida muy discreta alejado de los focos de los medios de comunicación.

Su última imagen con vida fue publicada por su nieto, Omar Alaa Mubarak, en la red social Instagram a principios de febrero y en ella aparece acostado en una cama, con el pelo completamente cano y muy desmejorado.