El candidato de la coalición Juntos Haremos Historia, Andrés Manuel López Obrador, dijo que su principal propósito será acabar con la corrupción y desterrar la impunidad.
Durante su inicio de campaña en Ciudad Juárez, Chihuahua, se pronunció por un gobierno que atienda a las mayorías, creyentes y no creyentes, de todas las clases sociales, de todas las culturas y de todas las preferencias sexuales, sin distinciones, publicó La Jornada.
Manifestó también que el nuevo gobierno debe dar ejemplo de combate a la corrupción y que las personas que lo conformen sean de inobjetable honestidad.
Mencionó que hay suficientes razones para ahorrar cuando menos el 10 por ciento del presupuesto público, que equivale 500 mil millones de pesos.
López Obrador refirió que la fórmula consiste en acabar con la corrupción y bajar los sueldos de los funcionarios y subir los de las personas más necesitadas.
Se pronunció por dar impulso a las actividades recreativas, al deporte profesional, y darle la mano a todos los ciudadanos que resultaron afectados por los sismos.
Se refirió a la franja fronteriza norte del país, donde consideró que por asunto de justicia, pero sin correr riesgos, se les reducirán los impuestos y se les aumentará el salario.
Más adelante advirtió al presidente estadounidense, Donald Trump, que no permitirá que México sea su “piñata”.
“Ni México ni su pueblo va a ser piñata de ningún gobierno extranjero”, señaló el aspirante presidencial.
Hacia el final de su discurso y en el tono de voz combativo que le caracteriza, dijo que defenderá a los migrantes mexicanos y pidió que se deje para después de las elecciones la conclusión del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCA), que está siendo renegociado por Estados Unidos, México y Canadá bajo presión de Trump.
“No estamos en contra del Tratado de Libre Comercio”, dijo. “Sin embargo, consideramos que sería conveniente que la firma de los nuevos acuerdos se realizara luego de las elecciones presidenciales”.
López Obrador dijo que el pacto debería incluir temas como salarios y migración e indicó que una parte central de su programa será generar desarrollo interno para que los mexicanos puedan permanecer en sus comunidades sin tener que emigrar.
“Vamos a ser muy respetuosos del Gobierno de Estados Unidos, pero vamos a exigir también respeto a los mexicanos”, dijo López Obrador. “Ninguna amenaza, ningún muro, ninguna actitud prepotente de ningún Gobierno extranjero podrá impedir que podamos trabajar y ser felices en nuestra querida patria”, indicó.
López Obrador, que quedó segundo en 2006 y 2012, dijo que en caso de ganar la Presidencia creará una zona franca de más de 3.000 kilómetros de largo y 30 kilómetros de ancho en la frontera, con impuestos bajos y salarios más altos, para que sirva de último freno a la migración.
“Esta será la última cortina para retener a los mexicanos y que no se vean en la necesidad de pasar al otro lado”, dijo, y rechazó el muro que Trump quiere construir en la frontera contra el tráfico de drogas y la inmigración.
“Que se oiga bien, que se oiga lejos: no es con muro ni con el uso de la fuerza como se resuelven los problemas sociales ni los asuntos de seguridad”, indicó. “Esos problemas se resuelven con desarrollo y bienestar”.
Aunque indicó que buscará frenar la salida de mexicanos mejorando sus condiciones de vida, dijo que defenderá su derecho “a ganarse la vida en cualquier lugar del mundo con su trabajo honrado”.