Los migrantes detenidos por la policía fronteriza de Estados Unidos dejarán de ser trasladados a la estación en San Diego, dijo Paul Carr, portavoz de la dependencia federal, quien además aseguró que la decisión no tiene ninguna relación con las recientes protestas en una estación en Murrieta, California.
El día de ayer en League City en Texas aprobó en reunión de cabildo que no aceptará solicitudes del gobierno federal para operar los centros de detención o de procesamiento de menores indocumentados.
La regidora Heidi Thiess, argumentó motivos de “salud y seguridad”, entre las razones para oponerse a albergar a los menores dentro de los límites de la ciudad.
Tomado de Eje Central.
