Con la pandemia, la deserción escolar se disparó en educación básica en Sinaloa de un ciclo escolar a otro.

Datos de SEPyC y de Informes de Gobierno indican que en el ciclo escolar 2018-2019 y 2019-2020 abandonaron la escuela el 1 por ciento de los niños de primaria y secundaria, en el 2020-2021 creció hasta el 9 por ciento y la cifra todavía podría duplicarse.

Aún con el aumento, para la Secretaría de Educación Pública el nivel de deserción durante la pandemia de COVID-19 se evitó una catástrofe educativa y se previno el desbordamiento del abandono escolar.

Con la implementación de las clases a distancia, de un ciclo escolar a otro en el estado dejaron la escuela 53 mil 127 niños y adolescentes; y hay otros 56 mil que todavía están considerados en riesgo de abandonar la escuela.

La deserción en Sinaloa está por encima del índice nacional que fue de entre 2.5 y 3 por ciento según estimaciones de la Secretaría de Educación Pública Federal.

De acuerdo con el INEGI, en todo el país dejaron las aulas 5.2 millones de estudiantes, de los cuales el 26.6 por ciento fue porque sus padres consideraron que las clases a distancia son poco funcionales para el aprendizaje, el 25 por ciento porque sus padres se quedaron sin trabajo y el resto porque no tenían computadora o dispositivo electrónico, carecían de internet o su escuela cerró definitivamente.

Durante los primeros seis meses de la pandemia, para Sinaloa la SEP pronosticaba un 10 por ciento de abandono a nivel nacional y el INEGI un 22 por ciento, equivalente a 126 mil niños.

En febrero de este año la realidad superó el pronóstico y en el estado había 141 mil 157 niños alejados de la escuela, en riesgo de dejar las aulas.

La SEPyC implementó los Centros Comunitarios de Aprendizaje, “Desde hoy a la escuela, Regreso sin prisa pero sin pausa”, para evitar que esos niños desertaran.

El Secretario de Educación Pública y Cultura, Juan Alfonso Mejía López, aseguró que las estrategias implementadas por la dependencia evitaron una catástrofe educativa.

“Nos rompió, sí, la pandemia ha tenido impacto, pero lo importante es cómo la escuela logró contener una catástrofe”, señaló.

Aseguró que la dependencia no asume una actitud triunfalista pero sí destaca que las estrategias de contención funcionaron evitando una catástrofe educativa.

Mencionó que la mayor afectación por deserción escolar fue en el nivel secundaria donde el abandono fue del 5.3 por ciento, en primaria fue del 2.54 por ciento y en preescolar del 1.32 por ciento.

Manifestó que en el corto plazo los daños por la pandemia serán el incremento en la tasa de abandono y en el largo plazo el aumento en las desigualdades desde las escuelas.

Los 56 mil niños que actualmente se encuentran en riesgo de abandono, explicó, son los que tuvieron promedio menor a 6.9 y aquellos que pasaron en automático con una calificación de 6 con el esquema “Todos Pasan”, implementado por el Gobierno Federal para que ningún niño reprobara.

“Medidas como el Todos Pasan no te permiten ver con claridad qué es lo que está viviendo un niño y eso lo pone en automático en riesgo de abandono”, dijo.

Mejía López indicó que a los niños que están en riesgo de dejar la escuela los tendrá que atender la próxima administración de Rubén Rocha Moya.

“Tenemos ciertos niños que seguimos detectando en abandono, esto tienes que ir replanteándote los criterios, hay antecedentes de cómo lo hicimos, pero eso, insisto, ya son decisiones de la próxima administración”, expresó.

Mencionó que “la urgencia es en los niveles como secundaria, llamar la atención sobre secundaria, ¿qué tenemos que cuidar hoy? La trayectoria, que ese niño llegue a prepa, que el niño de primaria llegue a secundaria”.

Aseguró que en la medida en la que no se regrese a las clases presenciales seguirá la pérdida de alumnos.

Actualmente son 2 mil 255 escuelas con 281 mil niños que se han sumado a las clases presenciales desde que inicio el ciclo escolar en agosto.

Mejía López indicó que la pandemia además afectó la salud mental de los estudiantes, y de acuerdo con una evaluación en el estado, el 73 por ciento de los alumnos logró sobreponerse a la dispersión de los aprendizajes; y el 64 por ciento a la ansiedad y frustración.

El director de Mexicanos Primero capítulo Sinaloa, Gustavo Rojas Ayala, dijo que es urgente atender el abandono escolar, la pérdida de aprendizajes y las afectaciones emocionales de los estudiantes.

Mencionó que todo aquello que no se aprende en los primeros años de vida, no se recupera jamás.

Si bien se han tenido avances con las estrategias que se ha implementado durante la pandemia, todavía se debe seguir trabajando, manifestó.

“Tenemos la oportunidad de ajustar y corregir para lograr un sistema educativo cada vez mejor, donde todos podamos ser parte de este cambio, convertir esta crisis en oportunidad, debemos aprovechar este momento histórico para reimaginar las instituciones educativas”, expresó.

Dijo que es imprescindible generar mecanismos de formación continua adecuada, así como acompañamiento y herramientas pertinentes para fortalecer los conocimientos y habilidades.

Artículo publicado el 24 de octubre de 2021 en la edición 978 del semanario Ríodoce.