Durante la presentación del plan de acciones para fortalecer el sistema financiero mexicano, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que durante su mandato no se van a aumentar los impuestos, ni mucho menos a crear nuevos, además de que se comprometió a no aumentar la deuda externa ni el déficit.
El mandatario aseguró que su gobierno no intervendrá en las decisiones del Banco de México(Banxico) y, al contrario, será un facilitador de negocios y su administración será “equilibrada”.
Al detallar su plan, Obrador dijo que un manejo austero del presupuesto permitirá liberar fondos para el desarrollo sin aumentar los impuestos y sin endeudar al país pues, “una buena administración significa un manejo austero del presupuesto”, publicó Reporte Índigo.
Al referirse a la inversión privada, afirmó que ésta será impulsada con capital semilla y ensalzó al sector financiero del cual dijo, “resulta indispensable para promover el crecimiento, el desarrollo y reducir la desigualdad”.
Para generar desarrollo en el país el presidente insistió en que se rehabilitarán dos refinerías, dos puertos y que se aprovechará la ventaja territorial de México, que tiene cerca el Océano Pacífico y el Atlántico, para impulsar en esa franja la creación de empleos.
Obrador aseguró que busca que el crecimiento sea de más del 2 por ciento y se comprometió a tener equilibrios económicos.
“Celebro que se esté logrando este acuerdo para la inclusión financiera, es muy importante. Se va a hacer un esfuerzo para lograr la conectividad en todo el país, en eso también tenemos atraso”, enfatizó el presidente.