Guasave, Salvador Alvarado y Mazatlán, observadas por irregularidades
Por estar en “focos rojos”, originado por el desorden administrativo encontrado en la revisión de las cuentas públicas en 2023, la Comisión de Fiscalización solicitó a la Auditoría Superior del Estado la realización de una auditoría específica en el 2024 a las Juntas de Agua Potable y Alcantarillado de Guasave, Salvador Alvarado y Mazatlán.
Aunque los diputados tomaron la decisión de fiscalización a fondo sobre lo encontrado por los auditores en 2023, la situación que viven estos organismos paramunicipales no es nueva, ya que, en 2022, la ASE encontró múltiples inconsistencias en el manejo de los recursos públicos.
La JUMAPAM (Mazatlán) acumuló un total de 28 pliegos de observaciones y recuperaciones probables por un total de 52 millones de pesos en 2022.
El gasto observado por la ASE fue originado por la realización de pagos sin contar con la documentación justificativa de gastos. Por ejemplo, se pagaron 275 mil pesos como premio de asistencia a persona de confianza, pero se omitió proporcionar el documento del funcionario que realizó el pago y el motivo de otorgamiento.
En la falta de evidencia de gasto, está también el pago de 392 mil pesos por concepto de volantes a un proveedor, sobre quien se omitió la documentación que acreditara que la JUMAPAM recibió a entera satisfacción del bien y que haya sido ingresado al almacén central de la Junta.
Adicionalmente la ASE encontró una inconsistencia con el contrato realizado con el proveedor, ya que en una cláusula se indicó que el proveedor se obliga a entregar los químicos en un plazo no mayor de 15 días, cuando el objeto del contrato era la compra de impresión de volantes por ambos lados.
En otra compra, la ASE emitió un pliego de observaciones porque se encontró un pago de un millón 098 mil pesos por compra de papelería diversas, pero no se mostró evidencia que la Junta recibió los bienes ni que fueron ingresados al almacén central de la Junta.
Entre las irregularidades está también el no haber reintegrado a la Tesorería de la Federación los recursos del fondo federal que al 31 de diciembre de 2022 no habían sido devengados ni vinculados a compromisos y obligaciones de pago.
La JUMAPAM había reportado la adquisición de una retroexcavadora case 580 super-K con un costo de 464 mil pesos, pero al realizar la inspección física los auditores de a ASE no la encontraron.
En el desorden administrativo, se registró también que se otorgaba suministro de combustible por un total de 205 mil pesos a vehículos que no se encuentran dentro del parque vehicular propiedad de la JUMAPAM.
Adicionalmente la junta realizó pagos en cantidad mayor a la debida por concepto de indemnizaciones, vacaciones y aguinaldo de personal.
Los auditores registraron además la realización de obra que no estaba beneficiando a la población en extrema pobreza y rezago social.
En el caso de la Junta Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Guasave (JUMAPAG), se obtuvieron 11 pliegos de observaciones y se determinaron recuperaciones probables por 8.4 millones de pesos, originados por actualizaciones, recargos y gastos de ejecución por pagar de manera extemporánea las retenciones del Impuesto Sobre la Renta por Salarios y Asimilados a Salarios, correspondientes a los ejercicios 2014 y 2022.
Entre las irregularidades figura el no haber reintegrado a la Tesorería de la Federación los recursos del fondo federal que no fueron devengados ni vinculados a compromisos y obligaciones formales de pago.
Otras de las anomalías administrativas encontradas por la ASE son las retenciones de Impuesto Sobre la Renta y cuotas de IMSS pagadas en cantidad mayor a la debida, además el pago de vacaciones laboradas y prima vacacional a trabajadores que no disfrutaron de su periodo vacacional.
Mención aparte merecen los pasivos sin fuente de pago de 8.3 millones de pesos, la realización de obras que no están beneficiando a la población en pobreza extrema y rezago social, debido a que no se encontró operando, además del volumen de obra pagada no ejecutada.
Un ejemplo de obra sin concluir es una rehabilitación de una planta potabilizadora de agua en el ejido Tecomate del municipio de Guasave, el cual tuvo un costo total de 2.4 millones de pesos. Los auditores registraron un avance del 82.90 por ciento de la obra, la cual tenía un desfase de entrega 3.5 meses.
A la Junta Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Salvador Alvarado (JAPASA), la ASE le determinó recuperaciones probables de 7.6 millones de pesos., debido a que no reintegró a la tesorería de la Federación los recursos del fondo federal que, al 31 de diciembre de 2022, no fueron devengados ni vinculados a compromisos y obligaciones formales de pago.
Entre las irregularidades observaron la adquisición de un camión Vactor Dina por un monto de 1 millón 734 mil pesos y el suministro de combustible a este por 46 mil pesos, ya que en una inspección realizada por los auditores de la ASE no fue localizado porque el funcionario público no protegió ni conservó adecuadamente la unidad que tenía bajo su resguardo.
Están también los recursos obtenidos por la devolución del Impuesto al Valor Agregado, sin contar con la documentación que justifique su aplicación.
La JAPASA incurrió además en pagos de indemnizaciones, primas de antigüedad y aguinaldos de los trabajadores, incumpliendo la normatividad aplicable.
Debió pagar multas y actualizaciones por no contar con permiso ni tratamiento previo por las descargas de aguas residuales a propiedad nacional; recargos y multas, por enterar de manera extemporánea el Impuesto Sobre Nóminas al Servicio de Administración Tributaria del Estado de Sinaloa (SATES), y pagos en cantidad mayor a la debido por concepto de retenciones del Impuesto sobre la Renta por Salarios al Servicio de Administración Tributaria (SAT).
La ASE observó además insuficiencia de recursos financieros no etiquetados para pagar los pasivos a corto plazo, sin fuente de pago, por un total de 16.3 millones de pesos.
Artículo publicado el 03 de marzo de 2024 en la edición 1101 del semanario Ríodoce.