Cine: ‘La gran seducción’

cine-la gran seduccion

Para que se instale una empacadora de pescado en la pequeña isla de Santa María del Mar y pueda ofrecer empleos a los poco más de 100 habitantes, solo se necesita un médico, pero nadie quiere ocupar ese puesto. Finalmente, Mateo (Pierre Louis) se ve obligado a realizar el trabajo, aunque solamente por un mes, por lo que el pueblo entero, con la astucia y creatividad de Germán (Guillermo Villegas), Ana (Yalitza Aparicio), Simón (Eligio Meléndez), Jorge (Héctor Jiménez), Benjamín (Julio Casado), Alba (Mercedes Hernández) y Consuelo (Paola Pérez Flores), hace lo impensable para convencerlo de quedarse más tiempo y, en un descuido, a vivir.

La trama de La gran seducción (México/2023), en lo general, es entretenida, agradable, alentadora, motivadora y ofrece la oportunidad de darse cuenta que, por más complicado que se considere un asunto y que se piense que no hay solución a los problemas, en ocasiones, con un poco de inventiva y entusiasmo se pudiera lograr un cambio y mejorar.

La narrativa de la cinta dirigida por Celso R. García es sencilla y condescendiente con el espectador, a quien en ningún momento defrauda ante las predicciones que hace y, sin lugar a dudas, se le cumplen, por lo que no se topa con sorpresas, no solo porque ya se haya visto alguna de las versiones de este producto, que hay en diferentes países –la original se hizo en 2003–, sino porque situaciones y personajes atienden cabalmente a los estereotipos y desde el planteamiento se puede asegurar en qué y cómo acabará la historia.

Lo anterior no es el mayor problema del filme escrito por Luciana Herrera Caso y el propio director. Incluso, pudiera tomarse como uno oportuno y necesario para apáticos y pesimistas, quienes tienen la oportunidad de asumirla como una lección de vida, para “tomar el toro por los cuernos”, “darle la vuelta a la tortilla” y responsabilizarse de lo que les toca. Más bien, los inconvenientes están en que se trata de una réplica exacta de la original, en su ritmo lento, en que los personajes nunca logran conectar con el público y en que las interpretaciones solo “cumplen con la tarea”.

Los ejemplos más significativos en las actuaciones son, por un lado, Guillermo Villegas, quien se queda muy corto. El papel de teniente en ese video viral en el que se le ve muy efusivo con la cara cubierta de cierto “polvo blanco”, y el que recientemente hizo en la cinta El último vagón (2023), son muestra de la gran capacidad histriónica que posee, (casi) ausente en esta ocasión.

Por otro lado, Yalitza Aparicio, en su tercer largometraje, aunado a algunos cortos y proyectos televisivos con los que se abre camino tras su controversial éxito en Roma (2018), no hace una mala interpretación, aunque tampoco extraordinaria. Pareciera que sigue muy bien las instrucciones que le dan, como alumna aplicada que cumple cabalmente con las asignaciones, pero hasta ahí. Es seca, sobria, cuadrada e inexpresiva: le falta chispa.

Quizás Meléndez, Hernández y Pérez Flores arriesguen un poco más y sean quienes logren provocar leves sonrisas. Eso sí, insuficientes para que la película recién llegada a Netflix sea imperdible e inolvidable. Véala… bajo su propia responsabilidad, como siempre.

Artículo publicado el 10 de septiembre de 2023 en la edición 1076 del semanario Ríodoce.

Facebook
Twitter
WhatsApp
Email
  • 00
  • Dias de Impunidad
RÍODOCE EDICIÓN 1109
GALERÍA
Suman cuatro cuerpos localizados en fosas clandestinas en las inmediaciones de Alturas del Sur y la Facultad de Veterinaria y Zootecnia, al sur de Culiacán en menos de 48 horas.
COLUMNAS
OPINIÓN
El Ñacas y el Tacuachi
BOLETÍN NOTICIOSO

Ingresa tu correo electrónico para recibir las noticias al momento de nuestro portal.

cine

DEPORTES

Desaparecidos

2021 © RIODOCE
Todos los derechos Reservados.