Sin convertirse en un primer filtro para la presentación de comprobantes de gastos de los diputados, la Dirección Administrativa del Congreso del Estado, se ha limitado a recibir facturas que cumplan con las características de validez oficial ante el Sistema Tributario.
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La Auditoría Superior del Estado levantó pliegos de observaciones en la cuenta pública de 2018 del Poder Legislativo sobre los gastos de comprobación que hicieron los diputados de la actual y anterior Legislatura.
En el informe individual de fiscalización, la ASE señaló que en la revisión de la cuenta pública del Poder Legislativo de 2018 se detectó que fueron presentados comprobantes fiscales para comprobar apoyos de gestoría y gestión social de los diputados, pero las solicitudes de apoyo de los beneficiarios fueron elaborados con fecha posterior.
La ASE presentó en su informe un total de 11 ejemplos de inconsistencias presentadas por los diputados en su comprobación. En un cuadro que presenta las anomalías en la comprobación del gasto, hay casos de hasta 191 días de diferencia. Los nombres de los diputados de la anterior legislatura que incurrieron en los hechos fueron testados por el Comité de Transparencia del Poder Legislativo, por lo que se desconoce quiénes fueron los diputados que presentaron esa documentación ante la Dirección de Administración del Congreso del Estado.
La ASE también registró un monto de 551 mil pesos por gastos de gestoría y gestión social de los legisladores que no justificaron con lista de beneficiarios, plano de construcción, constancia de estudios, diagnóstico médico, pase de abordar o documentación que acredite el motivo por el cual se entregó el apoyo. Por ello la ASE emitió un pliego de observaciones por considerar que pudo darse un daño o perjuicio a la hacienda pública.
En las omisiones de las comprobaciones la ASE detectó a diputados de la anterior y actual Legislatura el ejercicio fiscal 2018. Por ejemplo se señala el gasto por entrega de láminas galvanizadas a escuelas de CONAFE en Santa Rita y San José del Llano, pero no se presentaron los documentos en donde los planteles recibieron los apoyos por un monto de 27 mil 450 pesos; o pinturas a planteles por 27 cubetas que costaron 17 mil 550 pesos, sin existir evidencia documental de recibido por parte de las escuelas; o bien la entrega de un apoyo de 20 mil pesos por concepto de habitación, medicamento y honorarios médicos, pero no se anexa ningún diagnóstico médico; o bien la entrega de 12 mil 646 para la compra de una laptop, pero no se entrega la constancia de estudios del alumno beneficiario.
A lo anterior se suma que al menos 100 mil pesos de gastos de apoyos de gestoría no corresponden a los conceptos de solicitud de apoyos, por ejemplo en la actual Legislatura el concepto de gastos de despensa básica se comprobó con facturas de kilos de carne para asar; un apoyo para traslado a Ciudad Obregón se comprobó con una factura de compra de medicamento; un apoyo para perros en desnutrición se justificó con un comprobante fiscal de juguetes para mascotas; en la anterior Legislatura un apoyo económico para transporte y hospedaje está respaldado con una factura de servicio de mantenimiento de vehículos y compra de accesorios.
Refugio Álvarez Montaño, director administrativo del Poder Legislativo, explicó que son los diputados quienes directamente han estado aclarando la comprobación de sus facturas ante la ASE y están todavía dentro del plazo para solventar las observaciones.
A propuesta de la bancada de Morena, la JUCOPO firmó un acuerdo el 29 de julio de 2019, para establecer por vez primera los lineamientos para el ejercicio y comprobación de los apoyos a integrantes de la JUCOPO y grupos parlamentarios.
En apego al citado acuerdo, los recursos para grupos parlamentarios y miembros de la JUCOPO los apoyos deberían destinarse específicamente a nueve incisos, entre los se incluyen los pagos de honorarios por servicios de asesoría profesional, honorarios de asistentes y personal de apoyo, mantenimiento de equipo, pasajes aéreos, combustibles, y cualquier otro gasto debidamente justificado que tenga estrecha relación en la atención de funciones oficiales de la bancada.
Señala específicamente además que los recursos no deberán ser destinados al beneficio personal de cualquier tipo, financiar actividades de partido, apoyos a personas físicas o morales, o cualquier otra actividad o destino que no esté relacionada con la función de los grupos parlamentarios.
En los primeros nueve meses de la actual legislatura, bastaba entregar trimestralmente a la Dirección Administrativa un informe de una página, señalando, sin respaldo alguno de facturas, fiscales, el monto total gastado que coincidía con el recibido, y que el diputado señalara el concepto. Eso era suficiente, no había mayor trámite, para continuar recibiendo los apoyos. Desde la anterior Legislatura, cada grupo parlamentario recibe 12 mil pesos mensuales por diputado integrante, los coordinadores de cada bancada 20 mil pesos, más 10 mil adicionales a los diputados integrantes de la JUCOPO.
La forma en como operaba la falta transparencia se puede comprobar al consultar la plataforma del Sistema Nacional de Transparencia. Durante los primeros nueve meses durante la presente Legislatura se puede encontrar informes simples de una página, pero no respaldados por facturas de ningún tipo, hechos que no pasarían ninguna auditoría contable.
En la información disponible, ningún grupo parlamentario acompaña sus informes financieros trimestrales con comprobantes del destino de los recursos públicos.
Los primeros informes financieros permiten ilustrar la forma en como operaba la comprobación de gastos al inicio de la legislatura y en las anteriores, los cuales ni siquiera se presentaba con un formato homogéneo.
En el primer trimestre de la Legislatura, el Grupo Parlamentario de Morena reportó gastos por 828 mil 755 pesos distribuidos el pago de servicios profesionales, reuniones de trabajo de la bancada, participación en foros, eventos y reuniones, capacitación en asuntos jurídicos y legislativos, así como asesoría externa.
No existe precisión de fechas, nombres o propósitos de reuniones, tampoco de empresas contratadas, no se ofrece ninguna información adicional.
En la misma situación estuvo el primer informe financiero trimestral, correspondiente de octubre a noviembre de la bancada de PAN, firmada por el coordinador Jorge Iván Villalobos. Reportó un gasto por servicios profesionales por 72 mil pesos, pero no específica a quién pago ese monto. Un total de 2 mil 303 por servicios de banca e internet, de igual manera sin especificar los nombres de sus proveedores, así como 407 pesos por el pago de comisiones bancarias, cuya institución no se precisa. En total 74 mil 710 pesos gastados. No se acompañó el reporte con facturas.
En el primer trimestre, el PRD estaba reconocido como un grupo parlamentario porque había dos diputados de ese partido. Como bancada entregó un reporte de gastos por 24 mil pesos, por el pago de servicios de asesoría a Johann Hubbard Valdez (12 mil pesos), Martín Enrique Alcaraz (6 mil) y Ramiro Lizárraga Medina (6 mil). Tampoco se adjuntó evidencia documental de pago.
En el caso del Grupo Parlamentario del PRI se reportaron los gastos por 287 mil pesos, de los cuales 222 mil fueron destinados al pago de asesores, el resto para servicios profesionales, reuniones de trabajo de la bancada, aguas, refrescos, desechables y gastos de viaje. El informe financiero está firmado por el coordinador Sergio Jacobo Gutiérrez, y al igual que el resto de los grupos parlamentarios no llevaron adjunto el informe financiero de las facturas.
El coordinador del Grupo Parlamentario de Morena, Eleno Flores Gámez, presentó un informe de gastos de 108 mil pesos por dos reuniones. Una por un evento en el Hotel Fiesta Inn con la Congregación Mariana Trinitaria y otra con funcionarios activos del PT. Tampoco presentó facturas que respaldaran sus informes.
“Sería absurdo que nosotros les pidiéramos a los diputados que comprobaran sus gastos y cuando nos trajeran sus notas, sus comprobaciones no las aceptáramos”, justificó el secretario general del Congreso del Estado, José Antonio Ríos Rojo, al señalar que es el Órgano Interno de Control y la ASE quien califican posteriormente las facturas.
En clara referencia a casos como las facturas presentadas por diputados PT por compras de boxers y calcetines, manifestó que se le acusa al Congreso del Estado de comprobaciones indebidas, pero argumenta que hay todo un proceso para revisar las notas “si pasan o no pasan”. Por primera vez en la historia en la vida del Congreso del Estado se transparentan los gastos de los grupos parlamentarios, de los diputados y de las inversiones que se realizan; el Poder Legislativo terminó de ser el gran restaurante con comidas todos los días, hay ahorro y hasta sobra dinero, resume.
Las comprobaciones vip
Al inicio ningún coordinador de un grupo parlamentario presentaba comprobantes de sus gastos, aunque representa una obligación al recibir recursos públicos presentar el respaldo con facturas.
Sin obligación a justificar sus gastos, los diputados hacían un uso discrecional de los recursos que recibían del Congreso del Estado, ya sea a través de los apoyos a grupos parlamentarios, o como integrantes de la Junta de Coordinación Política (JUCOPO).
Artículo publicado el 06 de septiembre de 2020 en la edición 919 del semanario Ríodoce.
