Con el cierre parcial de la vialidad, esta mañana inició la modernización de la avenida Camarón Sábalo en Mazatlán.

Con una inversión de 200 millones de pesos y un tiempo estimado de obra de cuatro meses, esta avenida será reconstruida en su totalidad.

El banderazo de inicio fue encabezado por el gobernador Quirino Ordaz Coppel y el alcalde Luis Guillermo Benítez Torres, quienes no perdieron la oportunidad de echarse porras a sí mismos al asegurar que ambos le dejarán la vara alta a sus sucesores.

El caos vehicular inició desde las 9:30 horas de este miércoles con el cierre de la avenida que conduce de norte a sur.

A la altura del hotel El Cid, el tráfico prácticamente colapsó cuando los vehículos que se dirigían al sur empezaron a ser desviados al carril contrario.

Las quejas no se hicieron esperar por parte de operadores de transporte público que deben cubrir una ruta, pues en ese momento desconocían cuáles serían las vías alternas para retornar.

“¡Qué desmadre!, ¿Por qué no avisan para que la gente sepa por dónde vamos a pasar?”, cuestionó un chofer de una de las rutas que diariamente mueven a usuarios a sus centros de trabajo en la zona turística.

Señaló que de por sí esta avenida se ve transitada por proveedores, autobuses turísticos que donde sea bajan y suben pasaje, y los de los servicios públicos, lo que hace más lento el tránsito.

A unos minutos de que se dio el banderazo, los trabajos iniciaron con la perforación de la carpeta asfáltica, mientras los vehículos eran desviados por la avenida Gaviotas, antes Adolfo T. Loaiza.

A vuelta de rueda, por el hotel Playa Mazatlán, entre turistas que pretendían cruzar la calle, se vivió este primer día de obras que consistirán en la reposición del concreto, banquetas, alumbrado público y la incorporación de una ciclovía, con una longitud de 4 kilómetros, desde el antiguo hotel El Faro, hasta el Valentinos.

Quirino Ordaz indicó que la remodelación de esta vialidad durará cuatro meses, pero se trabajará las 24 horas de ser necesario, para generar las menores molestias posibles a hoteleros, restauranteros y habitantes de este sector, pues sólo se cerrará al tráfico un carril. Al concluir un carril, se trabajará en el otro.

Agregó que son constructores locales los responsables de está obra.

El mandatario dijo que se espera que para el verano ya se cuente con la nueva vialidad.

Hoteleros prevén mínimo impacto económico

A cuarenta días de que inicie Semana Santa, el presidente de la Asociación de Hoteles, Carlos Berdegué, dijo que con tiempo se estuvo notificando a los grupos grandes de turistas, de congresos, y convenciones para que previnieran las condiciones.

El empresario aseguró que las convenciones no se han cancelado.

Con relación a las posibles pérdidas o mermas en las ganancias que pudieran registrarse en Semana Santa, dudó que fuera a ser algo mayor.