El norte de Sinaloa no fue ajeno a los tiroteos y bloqueos carreteros que comenzaron en Culiacán tras la captura de Ovidio Guzmán López, heredero de Joaquín Guzmán Loera, el Chapo, líder del Cártel de Sinaloa ya detenido en Estados Unidos.
Y es que al sur de Los Mochis, a unos 10 kilómetros hacia Juan José Ríos, un comando incendió neumáticos sobre el carril sur para evitar la circulación de unidades; al norte, a unos 30 kilómetros hacia los límites del estado, hombres armados se apoderaron de dos camiones de carga que atravesaron sobre ambos carriles impidiendo la circulación.
Esos se retiraron al cabo de una hora.
Mientras, en el municipio de El Fuerte, a unos 50 kilómetros hacia el nororiente, sujetos tirotearon la sede de la policía municipal, sin que se conozca saldo de personas lesionadas o heridas.
Posteriormente, en Cabanillas, el mismo comando se enfrentó con agentes de la Guardia Nacional por espacio de media hora. Del tiroteo no se tienen mayores datos.
La policía municipal cerró la circulación hacia Choix y hacia Los Mochis por espacio de tres horas.
La situación en El Fuerte es tensa.