Ricardo La Volpe, quien es uno de los entrenadores más reconocidos del futbol mexicano, nuevamente ha dado de qué hablar.
Y es que resulta que durante la semana, el Bigotón le dio la oportunidad a su nieto de debutar en un partido oficial de la Copa MX con el primer equipo de los Jaguares de Chiapas.
Con 17 años, Mauro Ricardo Andrade tuvo su primera aparición profesional en el encuentro ante el Veracruz, aunque contó con el detalle de que cuando ingresó al campo, su abuelo ya había sido expulsado.
Ricardo Andrade es hijo del ex futbolista, Roberto Andrade, quien estuvo casado con una de las hijas del Bigotón. Al igual que su padre, juega como mediocampista, pero no es la primera oportunidad que ofrece La Volpe a un integrante de su familia.
Y de esas tienen varias. Por ejemplo en la Copa del Mundo 2006 llamó a su yerno Rafael Chiquis García, en lugar del histórico Cuauhtémoc Blanco.
También lo ha elegido como asistente técnico en sus recientes proyectos como entrenador. De hecho, Chiquis es actualmente su asistente con Jaguares y estuvo a cargo de un equipo de las Fuerzas Básicas de Atlas cuando el Bigotón llegó a dicho club en 2009.
Otro que también se benefició fue su yerno, Flavio Davino, quien es esposo de la hija mayor de Ricardo Antonio.
La Volpe y Davino hicieron dupla por bastante tiempo, Flavio fue su asistente en Boca Juniors y la Selección de Costa Rica, pero no es todo, en su único juego oficial con el tricolor, fue cuando el argentino era el técnico.
Por lo tanto, La Volpe le ha abierto las puertas en diferentes etapas a familiares, y su nieto está obligado a demostrar en la cancha que puede quedarse en Primera División.
EL JEFE, ¿PERSEGUIDO?: Tomás Boy, técnico de Cruz Azul, aseguró sentirse perseguido, luego de las polémicas que desató, primero en el juego ante el América, en el que se enfrascó en una discusión con Darío Benedetto, y segundo, tras calificar el Himno Deportivo de la UNAM como fascista el pasado martes.
“Siento que estoy un poco perseguido pero mi esencia no cambia, si no, no sería yo”, sentenció el Jefe.
“No me refería al himno, sino al ritual que retrasó el partido. Nada tiene qué ver la UNAM que respeto y admiro. Lamento mucho lo que pasó, pero no tiene nada qué ver una cosa con la otra y por eso quiero separar”.
Mientras son peras o son manzanas, Boy la regó. Ofendió a los Pumas y ahora indirectamente se está disculpando.
Pero conociendo a Tomás, todavía faltan más, quedan aún ocho fechas, así que hay que estar pendiente de él.
- Autor | Arturo González
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