En medio de un fuerte dispositivo de seguridad fue enterrado el escolta que fue asesinado en el atentado perpetrado contra del director de Seguridad Pública de El Rosario, Miguel España Rodríguez.
Manuel Sarabia, quien tenía 11 años dentro de la corporación, y 52 de edad, fue alcanzado por las balas que iban dirigidas al jefe policiaco, el coronel España Rodríguez, cuando repelía la agresión.
A las 16:00 horas de este viernes se llevó a cabo la misa de cuerpo presente en la iglesia de Nuestra Señora del Rosario, donde sus compañeros de armas, familiares y amigos hicieron guardia en el féretro donde descansaban sus restos.
Asistió la secretaria del Ayuntamiento, Teresita Benitez, quien hizo guardia. No asistió el alcalde Arturo Flores ni el director Miguel España Rodríguez.
Dentro del recinto católico, los policías ministeriales, no descansaron ni por un momento sus armas de cargo.
Inconsolable, la familia salió de la iglesia, donde se distribuyó una estampilla con la imagen de la Virgen de Guadalupe por un lado y por el reverso una oración Oración por la Paz.
“Únete a orar por México a las 8:00 pm”, conmina al final del rezo, en el que ruega por una patria dañada por la violencia y dispersa por el miedo y la inseguridad.
Enfialdas las patrullas de la Policía Ministerial y de la Policía Municipal, con ramos de flores y los uniformados a bordo, recorrieron la calle hasta salir por los arcos norte de El Rosario.
En medio del llanto y palabras de consuelo, fueron más fuertes las expresiones de frustración y ausencia de resignación. “¡No tenías por qué cuidar a nadie!”, “papito, te quiero”.
En el ambiente de dolor por la partida del compañero, los uniformados de la Municipal y Ministerial permanecieron a distancia, observando y pensando quizás en que pudo haber sido cualquiera de ellos.
Trascendió que el jueves a las 14:00 horas José Constantino Sajaropolus Corona, comandante de la Policía Ministerial, se presentó con los policías municipales como relevo provisional de España Rodríguez quien convalece de la herida de bala que recibió en el brazo el día del atentado.