Con 18 denuncias a cuestas, el IMSS, además de casos por sepsis, arrastra también casos por negligencia   

Además de las denuncias penales por la muerte de infantes neonatos (bebés recién nacidos), el IMSS tiene ahora también ahora también un par de denuncias por muertes de adultos. La semana pasada se sumaron cinco familias a las denuncias por muerte en condiciones no esclarecidas en el Hospital del IMSS, para poner la cuenta en 18 querellas hasta el cierre de esta edición.

Con lo cual, la crisis se vuelve más severa y el flujo de información en el interior del Hospital General Regional número 1, continúa siendo a cuentagotas.

Cinco familias más se suman a la larga lista de afectados por decesos en condiciones poco claras en el interior del hospital, para poner la cuenta en 18 querellas hasta el cierre de esta edición.

María Teresa Guerra Ochoa, presidenta del Colectivo de Mujeres y cabeza de las familias demandantes, dijo que la finalidad de estas acciones no son una cacería de brujas, sino que se aclaren los casos, se haga justicia y que el IMSS otorgue el servicio que merecen los derechohabientes.

“Esto simple y sencillamente confirma que en el Seguro Social no se está dando la atención debida. Lo que ellas buscan (las familias), además de justicia, es que el Seguro Social pueda brindar a quienes siguen acudiendo día a día la calidad en la atención que se merecen como derechohabientes”, indicó Guerra Ochoa.

Dos de las nuevas denuncias fueron por familias que acusan que los decesos de neonatos prematuros también son por sepsis, uno fallecido en mayo y el otro en agosto de este año, casos confirmados en documentos consultados por Ríodoce. La tercera es un caso de una madre que acusa negligencia, la cual terminó por causar daño cerebral a su bebé.

Entre enero y agosto de este año, según documentos consultados, ocurrieron 39 decesos en esas condiciones, la mayoría de ellos, 30 entre mayo y agosto, según datos publicados por Ríodoce en su edición 662.

Mayo destapa la alerta

Gladys Eunice Ochoa Camacho esperaba su segundo hijo, se llamaría Renata. Algo no salió bien y su bebé murió.

Originaria de Mazatlán, Gladys tuvo que trasladarse a Culiacán para dar a luz. El parto fue el 17 de enero, la bebé Renata empezó a experimentar problemas por lo que los médicos decidieron trasladarla a los cuneros de Culiacán, y el día 6 de mayo a las 23:00 horas fue internada en el HGR.  Murió 16 días después.

“Pues en el Seguro dicen que fue por choque séptico y desnutrición severa, pero en realidad la doctora a mí me dijo que fue una bacteria que atacó a mi hija y ya no pudieron hacer más. Empezó a dañarle sus riñones, le pusieron sangre, luego a ponerle plaquetas y la niña no pudo aguantar más, estaba muy chiquita”, explicó Gladys Ochoa.

“Mi embarazo fue… mis cuentas eran siete meses pero aquí (en el IMSS) decían que tenía mi hija seis meses y medio. Y sí estaba chica la niña, pero aun así tenía ganas de vivir porque ella le estaba echando ganas, ya me la iba a llevar a mi casa, faltándole 400 gramos para llevármela a  mi casa. Al llegar aquí no, no pudimos. O sea, adquirió la bacteria y ya no se pudo hacer más”, añadió Gladys.

La bebé Renata ingresa en mayo donde, según los documentos en poder de Ríodoce, siete neonatos fallecieron. En cinco se registra como causa una sepsis. El 22 de mayo a las 15:30 horas, a Gladys le dieron la noticia de que su hija falleció. El diagnóstico completo (EGRPAC) dice que al bebé le encontraron una sepsis, neumonía infecciosa, falta de vitalidad, inmaturidad y liviano para la edad.

El primer deceso con sepsis involucrada en ese mes se dio el 2 de mayo a las 15:30 horas. El siguiente vino el 16 de mayo y las restantes, entre el 21 y el 23 de mayo. Ahí aparece el nombre del bebé de Gladys.

Luego en agosto, el día 29, el bebé de Azucena Ramírez Celaya fallece también, revelando su caso muchas inconsistencias en los informes del IMSS.

Según los documentos consultados, el bebé de Azucena pertenecería al registro de septiembre, ya que el conteo inicia después de los días 26 de cada mes, y el deceso ocurre el día 29 de agosto, haciendo más grueso el conteo, aún sin descifrar, de septiembre.

Las últimas semanas de su vida

A Hilario Parra Payán lo internan en el HGR un 10 de septiembre por una lesión craneal. Tras realizarle la operación, su recuperación iba lenta pero en ascenso, hasta que algo sale de control, y 19 días después fallece a los 59 años de edad.

En medio de la crisis por sepsis en los cuneros patológicos del nosocomio, la familia Parra Cruz creyó que su estancia sería transitoria, sin embargo, una “consecuencia” terminó con la vida de Hilario.

“Mi papá entró por un riesgo de trabajo, él se cayó en su trabajo. Le hicieron su cirugía, no tuvo ningún daño neurológico, todo estuvo muy bien. Un día antes de que él muriera el neurólogo lo dio de alta”, añadió.

Reyna Isabel explica que durante su recuperación, su padre comenzó a hincharse, por lo que requirieron ayuda y esta no llegó, hasta que acudieron en busca del neurólogo que los atendió.

“Él presentó calenturas, él presentó diarreas y no le hicieron caso, nos decían ‘tiene peritonitis’, ahorita nos dicen que peritonitis no pudo haber sido porque él tenía diarrea, eso nos comentaron”, dijo.

Según Reyna Isabel, un día antes de su muerte le ordenaron otros estudios pero nunca les dijeron que tenía esa bacteria, hasta que llegó el día de su muerte el martes 29 de septiembre. Ella y su familia descubrieron que Hilario tenía un choque séptico en el abdomen, y le causó la muerte.

“Yo le pregunto al médico que expidió el certificado de defunción, doctor, ¿de qué murió mi padre? No me dijo, me enseñó el papel como diciendo léelo tú y en el papel decía ‘choque séptico, sepsis abdominal’ siendo que mi padre no tenía eso”, dijo.

Hilario, se convierte hasta el momento en el primer caso confirmado por sepsis en adultos, lo cual pone en controversia los protocolos de higiene y sanidad en el interior del nosocomio.

También está el caso de Jennifer Jazmín Juárez Manjarrez, quien a sus 19 años falleció por un colapso pulmonar el 6 de abril pasado.

A sus padres, Ezequiel Juárez y Norma Leticia Manjarrez, les advierte un doctor que su hija pudo contagiarse de una bacteria, la cual terminaría por enfermarla de una neumonía, y a la postre, causarle la muerte.

“Llevaba un problema menor que era su insuficiencia renal crónica, que no estaba en estado crítico, o sea, no era para que se quedara en el IMSS, era para que la establecieran. Entonces ya su permanencia ahí, además de ese colapso pulmonar que no la atendieron y se agravó también con lo de la bacteria, pero esa bacteria que le provocó la neumonía no la pusieron ni en lo que van anotando a diario para generar un expediente ni tampoco lo pusieron en el acta de defunción, pero los doctores ahí me dijeron que sí tenía ya esa bacteria”, explicó Ezequiel Juárez.

El primero de abril, Jennifer sufre un paro respiratorio al cual sobrevive, sólo para recibir una dosis de morfina para contrarrestar el dolor provocado por el colapso en sus pulmones. Duró cinco días en urgencias y dos semanas interna, el resto lo haría la bacteria.

“Voy a demandar por homicidio o por lo que resulte, puede ser que me equivoque. Mi conclusión es esa. Puede ser que esté equivocado pero las investigaciones deben arrojar la verdad si es que se realizan, si es que no le dan carpetazo al asunto”, dijo el padre de Jennifer.

Los casos serán absorbidos por la PGR: Higuera Gómez

Las 18 denuncias en contra del IMSS serán turnadas ante la Procuraduría General de la República, informó el procurador del estado Marco Antonio Higuera Gómez.

“En ese asunto en particular, la PGR ya solicitó que al tratarse de empleados federales, les remitiéramos la averiguación, lo que efectivamente estamos esperando es una documental de ese informe, para que una vez acreditada esa situación, remitir la averiguación previa a la PGR, para que ellos continúen la investigación”, explicó el titular de la PGJE.

Higuera Gómez sostuvo que ellos ayudan en la integración del expediente, para además ayudar a los afectados mediante el programa de apoyo víctimas del delito.

Por otra parte, Tere Guerra, del Colectivo de Mujeres, explicó que las investigaciones siguen un buen curso, y que los familiares se encuentran a la espera de respuesta por parte de la PGR.

“Tenemos información que habrá una reunión entre la Procuraduría del Estado y la delegación de la PGR a efecto de turnar el expediente a la PGR. Los familiares están conscientes que se presentará la denuncia aquí para ver si pueden acogerse a protección de víctimas del estado que les ha estado brindando cierto nivel de protección, pero que la denuncia terminará en la PGR”, dijo.