El cortejo en las especies

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MÚSICA ENTRE ARAÑAS, DANZAS ENTRE CANGREJOS Y REGALOS ENTRE AVES

De las distintas etapas del amor, una de las que más se puede disfrutar es, sin duda, la conquista.
Es la etapa en que se unen la creatividad y la perseverancia para sacar a flote el ingenio de los amantes y llamar la atención de quien podría ser su pareja. La naturaleza lo ha hecho durante siglos en las distintas especies que conforman el reino animal, y con características únicas en cada una de ellas.

La araña hembra normalmente se encuentra en su morada cuando de repente n sus patas siente un pequeño movimiento causado por un intruso en su casa, que tiene peculiar interés en ella. Entonces se lo propone y empieza a realizar una danza sobre la telaraña que da la impresión de ser tan frágil. Ella, encantada por esa ‘música’, esos sonidos que solo apenas ellos tienen el privilegio de escuchar, atraída por ese macho que ha logrado
apañar toda su atención, cae en sus redes de seducción.

Cada especie tiene su manera tan propia, tan suya, de llamar la atención de su hembra. Durante el cortejo los regalos
son bien recibidos, el “jardinero satinado”, una especie de ave endémica de Australia, tiene una buena vista para conseguirle los regalos a su hembra y conoce muy bien que el color azul es su favorito, así que se esmera consiguiendo todo lo que sea de ese color para construir un  pequeño jardín azulado. Él sabe que entre más azul, las hembras se encontrarán más atraídas.

En el mar, el cortejo es aún más complicado  porque es un mundo de confusión y mezclas sexuales. Algunas especies
de peces forman cardúmenes donde las hembras son las dominantes y cuentan con un macho alfa, si el macho desaparece la hembra dominante ocupa el puesto del macho pues su sexualidad es bipolar, ósea que puede realizar
un rápido cambio de sexo para reemplazar al macho.

El cangrejo violinista, cuyo nombre se debe al tamaño desproporcionado de una de sus dos pinzas —la cual utilizan
para marcar el territorio y atraer a sus hembras—, tiene otra estrategia: el macho exhibe esa pinza con movimientos enérgicos.
En otras palabras, el macho realizaun baile de cortejo especial alrededor de la hembra, mostrando su pinza para llamar su atención, algo muy útil cuando hay tanto pretendiente compitiendo.

Flores, chocolates y una cena romántica son comunes en el cortejo humano, a veces tan repetitivo y aburrido. Queda
muy corto comparado con el espectáculo que ellos, las diferentes especies animales, dan cada vez que se eligen y se conquistan.
Sinceramente, qué envidia.

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