Observa al gobierno del estado la cuenta pública de 2022

La Auditoría Superior de la Federación presume un daño al erario por 31 millones 403 mil 639 pesos por irregularidades en fondos federales aplicados por el Gobierno del Estado, de los cuales 26 millones son por pagos en exceso con recursos del Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública.

La ASF dio a conocer la segunda entrega del Informe de Resultados de la Fiscalización Superior Cuenta Pública 2022.

En el caso de Sinaloa, los auditores encontraron irregularidades en el Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública (FASP), Fondo de Aportaciones para la Educación Tecnológica y de Adultos y en el Fondo de Infraestructura Social para las Entidades.

En el FASP señala que habían programado la compra de bienes y el monto que se gastaría y compraron menos bienes de los programados, pero gastaron más.

El Gobierno del Estado de Sinaloa, indica, programó recursos para “Equipamiento e Infraestructura de los elementos policiales y las Instituciones de Seguridad Pública”, para la adquisición de cinco motocicletas con un costo unitario de 240 mil pesos, 34 vehículos con un costo de 710 mil 600 pesos cada uno y 26 vehículos municipales con un costo unitario de 569 mil 200 miles pesos.

Sin embargo, adquirió tres motocicletas con valor unitario de 400 mil pesos, 26 vehículos con un costo unitario de 929 mil 200 y 14 vehículos municipales por un millón 57 mil 100 pesos cada uno.

Adicionalmente, para la procuración de justicia programó 21 vehículos con costo unitario de 307 mil 800 pesos de los cuales adquirió 17, cada uno 380 mil 300 pesos; además, en el subprograma “Desarrollo de las Ciencias Forenses en la Investigación de Hechos Delictivos” programó la compra de tres refrigeradores de laboratorio con un costo unitario de 28 mil 600 pesos de los cuales adquirió dos por 42 mil 800 pesos cada uno.

La ASF señala que no se rebasó el monto asignado a los subprogramas, sin embargo, no se justificó el motivo por el cual se adquirió un menor número de bienes a un precio superior al programado, lo que generó pagos en exceso por 22 millones 482 mil 900 pesos, y tampoco se presentó la autorización por parte del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública de las adecuaciones a las unidades y montos originalmente convenidos, ni se alcanzaron las metas programadas.

“Se presume un probable daño o perjuicio, o ambos, a la Hacienda Pública Federal por un monto de 22,482,904.78 pesos (veintidós millones cuatrocientos ochenta y dos mil novecientos cuatro pesos 78/100 M.N.), más los rendimientos financieros que se generen desde su disposición hasta su reintegro a la Tesorería de la Federación, por no justificar la adquisición de un menor número de bienes a un precio superior al programado y por la falta de la autorización, por parte del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública”, indica la observación de la ASF.

Del mismo fondo, los auditores revisaron ocho convenios de colaboración institucional para la impartición de cursos y encontraron que realizaron pagos por un total de 4 millones 160 mil pesos, correspondientes a tres convenios formalizados el 17 de octubre de 2022, a la Universidad de la Policía del Estado de Sinaloa (UNIPOL), pero no todos los cursos fueron impartidos.

Los convenios eran para la impartición de los cursos de formación inicial a 27 aspirantes a Policía de Investigación, formación inicial a 24 aspirantes a Perito y formación inicial a 50 aspirantes a Policía Preventivo Municipal, los cuales seguían impartiéndose en mayo de 2023 con una conclusión programada al mes de junio de 2023 por lo que fueron pagados sin ser devengados.

En mayo de 2023 los auditores hicieron una visita a las instalaciones de la Unipol para realizar un pase de lista y constatar la asistencia de los aspirantes y solo se acreditó la capacitación de 22 de los 27 aspirantes a Policía de Investigación y 20 de 24 aspirantes a Perito.

El Gobierno del Estado de Sinaloa, detalla, en el transcurso de la auditoría proporcionó la documentación que acredita el reintegro a la Tesorería de la Federación de recursos por 380 mil pesos, pero aún se encuentran pendientes de aclarar o justificar recursos por 3 millones 780 mil, que corresponden a la impartición de cursos de formación inicial.

“Se presume un probable daño o perjuicio, o ambos, a la Hacienda Pública Federal por un monto de 3,780,000.00 pesos (tres millones setecientos ochenta mil pesos 00/100 M.N.), más los rendimientos financieros que se generen desde su disposición hasta su reintegro a la Tesorería de la Federación”, indica la ASF.

El documento menciona que en el ejercicio de los recursos, el Gobierno del Estado de Sinaloa infringió la normativa del fondo, principalmente en materia de Destino de los Recursos y Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios, lo que generó un probable daño a la hacienda pública federal por 26 millones 262 mil 900 de pesos, que representan el 14.9 por ciento de la muestra auditada.

La ASF también detectó irregularidades en Fondo de Aportaciones para la Educación Tecnológica y de Adultos.

Con la revisión de una muestra de 150 trabajadores del ISEJA, correspondientes a puestos de base, de confianza y de mando, detalla, se verificó que trabajadores cumplieron con el nivel académico requerido para el desempeño de los puestos bajo los cuales fueron contratados; pero con la documentación se identificó que 11 trabajadores no acreditaron el nivel académico requerido para el puesto contratado y pagado con recursos federales, por lo que se presume un probable daño a la hacienda pública por 2 millones 369 mil 261 pesos.

En el Fondo de Infraestructura Social para las Entidades, la ASF presume un probable daño o perjuicio, o ambos, de 2 millones 771 mil 474 pesos por la realización de un proyecto que no corresponde con los previstos en el catálogo señalado en los Lineamientos del Fondo, ya que son pagos realizados por conceptos de nómina en lugar de los conceptos previstos bajo el rubro de gastos indirectos conforme al catálogo señalado en los Lineamientos del Fondo.

Artículo publicado el 12 de noviembre de 2023 en la edición 1085 del semanario Ríodoce.