En su visita a Culiacán y Ahome, la aspirante a la candidatura presidencial de Morena basó sus participaciones en los logros del presidente

Claudia Sheinbaum visitó el pasado viernes Culiacán y Ahome, y ofreció discursos basados, más que en propuestas y proyectos, en los logros del presidente Andrés Manuel López Obrador.

Durante su visita en Culiacán, en donde presidió una asamblea informativa en el estacionamiento de la Feria Ganadera, la ex jefa de gobierno de la CdMx y actual aspirante a la candidatura presidencial por Morena, dio un mensaje de 23 minutos en el que mencionó en 15 ocasiones a López Obrador.

Sheinbaum, una de las “corcholatas” que busca asumir el Comité de Defensa de la 4T, dio un informe sobre los cinco años y medio de la administración de AMLO y mencionó los aumentos salariales, basificaciones de maestros, pensión universal a los adultos mayores, becas, el tren Maya, la refinería de Dos Bocas, dos aeropuertos, parques industriales…

Todo, dijo, los hizo posible sin endeudar al país y sin aumentar los impuestos, erradicando la corrupción y acabando con los privilegios.

Contó la historia de las transformaciones del país hasta llegar a la cuarta, encabezada por López Obrador.
Manifestó que el presidente es el mejor que ha tenido el país y le lanzó vivas.

Explicó que decidió participar porque quiere, por convicción, decisión e historia de lucha, que continúe la cuarta trasformación de la vida pública de México y porque de las seis “corcholatas”, solamente hay una mujer y ya es tiempo de las mujeres.

“Nosotros luchamos por principios, por causas, no se trata de llegar a un puesto público solamente por llegar, se trata de que las causas del movimiento sigan vigentes, que la lucha del movimiento siga vigente”, comentó.

Antes, por dedazos, decidían quién iba a continuar, pero ahora será de manera democrática, como ha sido siempre el movimiento de transformación, indicó.

“Que no se nos olvide todo lo que luchamos para llegar a la cuarta transformación de la vida pública del país y no queremos regresiones al pasado, ¿o sí?, ¿a poco queremos que regrese el avión presidencial? ¿a poco queremos que regresen los presidentes a Los Pinos? ¿queremos que se vayan las pensiones para adultos mayores? ¿queremos que vuelvan los gobiernos que utilizaban los recursos para beneficio personal?”, cuestionó.

Sheinbaum mencionó que hay un bloque opositor que se organiza y tiene mucha simulación y son como una tienda de disfraces en la que “se visten de demócratas que son de izquierda pero solo quieren volver al pasado”.

Mucho escenario, poco público

Martín González

Y mientras la exjefa de gobierno de la CdMx se transfigura sobre el escenario en AMLO, en las sillas colocadas para la ocasión hay mucho público que no llegó.

Camiones y autobuses con acarreados de todo el estado, son insuficientes para llenar el sillerío dispuesto bajo la estructura armada para el recibimiento de la “corcholata” del presidente.

Mesas de registro para el asistente y calca distintiva para el registrado.

Una hora después de lo programado, la exjefa de gobierno de la Ciudad de México hace su arribo.

Ella es Claudia. La “corcholata” que se deja apapachar a lo largo de la valla dispuesta para su visita. La que comparte un poco de su resplandor con la base de acarreados que se inmortalizan en los pixeles de sus celulares.

Claudia es toda sonrisa antes de su transfiguración. El micrófono la transforma. Ya no es Claudia. Ahora es López Obrador. Su discurso es plano, monótono. Lánguido y mustio.

Los espacios van quedando solos. Sillas vacías en áreas abandonadas por el asistente contrastan con el entusiasmo de los afiliados al Stasac que se desgañitan por la “corcholata”.

En Los Mochis, la misma dosis: acarreados disfrazados de seguidores

Luis Fernando Nájera/Los Mochis

Unas horas antes de su evento en Culiacán, y en el mismo escenario convocado por Adán Augusto López, que fue llenado con los mismos acarreados a quienes se les ofrecieron los mismos apoyos gubernamentales, con una escenografía distinta y con el mismo resultado: el abandono de las instalaciones antes de que concluyera el acto proselitista, concluyó la asamblea informativa de Claudia Sheinbaum, en Los Mochis.

En el Centro de Usos Múltiples, la ex Jefa de Gobierno de la CdMx arengó que busca consolidar los logros del presidente y criticó el que “antes, todo lo quisieron convertir en mercancía, que todo costara” y por ello llamó a la no regresión, no a pasos para atrás y no a la derecha.

El Centro de Usos Múltiples no se llenó de, como sí lo hizo Adán Augusto López, primero, y Sheinbaum no logró encender a la concurrencia, pese a los esfuerzos de las decenas de maestros que se dispersaron en las gradas y en la cancha para arengar porras, vivas y loas.

Sheinbaum partió plaza iniciando con un sacrilegio a los usos y costumbres de los pueblos mayos-yoremes, promovido por el Consejo de Kobanaros de Sinaloa, pues recibió un supuesto bastón de mando, réplica del original, el cual no debe salir del templo del centro ceremonial, pues en el caso del político conlleva la responsabilidad de acudir tres años a la iglesia para prestar servicios a la etnia, y en plena faena se le dio una limpia, costumbre que tampoco existe a excepción de la medicina tradicional, y se le impuso un pañuelo rojo que los indígenas usan como amuleto para alejar malos espíritus, pero también para secarse el sudor.

Artículo publicado el 16 de julio de 2023 en la edición 1068 del semanario Ríodoce.