Un hombre originario de Culiacán fue condenado a 10 años de prisión en Arizona, por contrabandear armas de grueso calibre de Estados Unidos a México.
El Departamento de Justicia informó que el sentenciado se llama Luis Enrique Beltrán Beltrán, de 41 años.
Beltrán se había declarado culpable previamente de una acusación de conspiración para exportar y ayudar ilícitamente a la posesión ilegal de ametralladoras, granadas y lanzagranadas.
El culiacanense había sido extraditado de México a los Estados Unidos en 2017.
Los agentes recibieron información en 2011 de que Beltrán estaba traficando armas de grado militar de Estados Unidos a México.
La investigación reveló que buscó comprar y pasar de contrabando hasta 10 ametralladoras con lanzagranadas adjuntos y 50 granadas cada semana.
Beltrán, quien orquestó su actividad criminal desde México, también dirigió a otros conspiradores para contrabandear más de 50 mil municiones y cientos de cargadores de alta capacidad.
Al condenarlo a la máxima sentencia permitida por la ley, el juez citó la gravedad de los crímenes de Beltrán y su papel como líder de una extensa conspiración para el tráfico de armas.
