A sólo 21 días del primer ataque en la zona turística de Mazatlán, donde un hombre perdió la vida a causa de impactos de bala, el viernes pasado de nueva cuenta se registró otra muerte.

Un hombre de 44 años, identificado como Rafael “N” fue asesinado de un balazo. El cadáver quedó sobre la avenida Paseo Lomas de Mazatlán, una vialidad escolar por la que alumnos del Colegio SAM transitan diariamente.

La agresión ocurrió poco antes de las 8:00 horas, justo a la hora de entrada de los escolares, durante el lapso en el que el tráfico vehicular se intensifica a causa de quienes llegan unos minutos antes de que el plantel cierre sus puertas.

Según los primeros testimonios, un hombre llegó a bordo de una motocicleta y sin mediar palabra alguna, se acercó a la víctima y le disparó.

Identificado como vendedor de bienes raíces, Rafael “N” se dirigía a una reunión de trabajo que habitualmente la empresa para la que labora hace en la cafetería Starbucks Zona Dorada.

A diferencia de otros casos, en los que las autoridades ministeriales tardan horas en hacer labor de peritaje, en esta ocasión el cuerpo de la víctima fue levantado de inmediato del sitio, mientras dos patrullas de la Policía Estatal cerraron la avenida desde la Camarón Sábalo.

Clientes de la cafetería, entre ellos algunos extranjeros, lamentaron el asesinato, mientras que otros decidieron abandonar la ciudad de manera inmediata.

De acuerdo a testimonios de algunos padres de familia, el ataque ocurrió minutos antes de la hora de entrada al plantel educativo, lapso en el que algunos alumnos iban llegando.

Señalaron la falta de seguridad que se ha registrado en las últimas semanas en el puerto, así como la poca vigilancia y patrullaje en esta zona que es muy concurrida, incluso por las tardes, cuando los alumnos asisten a realizar actividades deportivas en esa institución.

El contexto

Apenas hace 21 días, en el cruce de la Avenida del Mar y Rafael Buelna, un hombre fue atacado a balazos en las primeras horas de iniciar las actividades del Tianguis Turístico México, en el puerto de Mazatlán.

Minutos más tarde, la víctima murió al ser atendido en un hospital particular.

Horas antes, otro hombre ya había sido asesinado, también con arma de fuego, afuera de un salón de eventos en el centro de la ciudad, a unas cinco cuadras del cinturón de seguridad que el Estado Mayor Presidencial había establecido para recibir al presidente Enrique Peña Nieto, quien inauguró el evento turístico.

En ese contexto, el secretario de Seguridad Pública del Estado, general Genaro Robles Casillas, sostuvo que el puerto estaba seguro y que el blindaje no había sido vulnerado, pese a que haya “gente loquita” matando a las personas.

Pero el Tianguis Turístico México concluyó el 18 de abril y con él, el “blindaje” implementado para brindar seguridad al presidente Peña Nieto, gobernadores e invitados internacionales.

En Mazatlán no sólo antecedieron hechos de alto impacto al evento que el propio gobernador calificó en reiteradas ocasiones como “un éxito”, sino también después de éste, cuando la diferencia ha sido notoria.

El 24 de abril un hombre fue asesinado a balazos a un costado de las vías del tren, entre las colonias Azteca y Pino Suarez.

El mismo día, en el fraccionamiento Alborada, el hallazgo de un cuerpo semienterrado alertó a las corporaciones de nueva cuenta.

Horas más tarde, otro cuerpo masculino fue encontrado envuelto en plásticos azules, cerca del Ejido El Castillo, rumbo a la salida sur del puerto.

Abril cerró con el hallazgo de una osamenta enterrada en Pradera Dorada, sección 6, ubicada al sur de Mazatlán.

Mayo inició con el asesinato de un hombre identificado como el Pecas, quien perdió la vida a causa de impactos de bala que recibió en la espalda, luego de protagonizar una persecución el día jueves 3, en la colonia Benito Juárez.

Un maestre de la Marina, identificado como Carlos “N” de 30 años de edad, fue asesinado a balazos cuando se encontraba adentro de un vehículo en el fraccionamiento Ampliación Villa Verde.

Artículo publicado el 6 de mayo de 2018 en la edición 797 del semanario Ríodoce.