Dos hermanos acusaron a elementos de la Policía Municipal de Culiacán de detener sin justificación a uno de ellos y golpear al otro en las instalaciones de la corporación, cuando fue a pagar la multa.

Los afectados son Juan Carlos y Gregorio Ayala, vecinos de la colonia Guadalupe Victoria y de oficio carpinteros.

En comprobante de pago del Tribunal de Barandilla quedó registrado que Gregorio pagó una multa de 800 pesos por escandalizar en la vía pública en el boulevar Agricultores.

El joven de 23 años dijo que no estaba escandalizando y tampoco fue arrestado en el lugar donde señaló la policía.

Narró que los agentes lo detuvieron alrededor de las 10:40 horas del viernes pasado, cuando llegaba a su casa en una motocicleta después de haber ido a comprar comida.

Mencionó que justo cuando llegó a su vivienda, detrás de él arribó la patrulla número 3704 y las motocicletas 0473 y 0526 y sin justificación lo subieron a la patrulla.

Los agentes lo trajeron en la unidad mientras continuaban arrestando personas que traían motocicletas por diversos sectores de la ciudad.

El joven fue ingresado a la instalaciones de la corporación hasta después de las 15:00 horas, donde lo hicieron firmar un documento que decía que lo habían arrestado por escandalizar y le dieron 12 horas de arresto y pago de multa.

Su hermano Juan Carlos señaló que después de la detención se fueron a las instalaciones de la Policía, donde les negaban información.

Hasta después de las 18:00 horas dieron información de su hermano y le permitieron pasar a pagar la multa.

Comentó que entró a barandilla y tras pagar le dijeron que esperara afuera del edificio.

Mientras esperaba, acusó, llegaron dos agentes, lo sometieron y lo llevaron a un costado del edificio, donde se sumaron otros tres policías, entre ellos una mujer, y lo empezaron a golpear.

Juan Carlos mencionó que los agentes le preguntaban para qué narco trabajaba.

Durante la agresión que duró alrededor de 15 minutos, le quitaron el celular para borrarle la información que tenía y lo despojaron de sus identificaciones.

Señaló que uno de los policías lo amenazó para que no dijera de la agresión y le advirtió que si quería lo mandaba buscar y matar.

Mencionaron que fue hasta alrededor de las 19:00 horas cuando los dejaron salir de las instalaciones de la Policía.

Los hermanos dijeron que presentarán denuncia en la Fiscalía General de Justicia y queja en la Comisión de Derechos Humanos.