Felipe Parada, recaudador de rentas de  Mazatlán se presentó ante el gobernador para informarle directamente respecto a la agresión de la que fue objeto el pasado sábado.

Mario López Valdez se encuentra en Mazatlán en una gira de trabajo, y fue precisamente durante la inauguración de 40 bodegas del Parque Logístico que el funcionario lo abordó para ponerlo al tanto de lo ocurrido.

El funcionario estatal descartó interponer una denuncia, al considerar que piensa en la seguridad de su familia antes que en buscar se castigue a los presuntos culpables de su secuestro.

El recaudador cree que lo levantaron por el rumbo del asentamiento Urbi Villas, ubicado al sur de la ciudad.

“Le platiqué mi experiencia y él me dio todo su respaldo y todo lo demás, (…) pongo mi vida en manos de Dios, desde ese día le doy gracias a Dios por estar con mi familia, mi hija, es algo que no le deseo a mi peor enemigo”, dijo.

Todo el tiempo estuvo sometido, aseguró, ni le dijeron cuál era el móvil del secuestro.

“El caso se lo dejo al gobernador, como mi jefe, como el encargado de garantizar que todos los ciudadanos y sinaloenses estemos tranquilos”, expuso.

Valorará si presentará su renuncia. ”El trauma no se supera en un día, efectivamente hay veces que no es necesario dar un golpe para someter a alguien, a veces el terror es más sicológico que físico”

Ignoró su estuvieron los tres secuestrados juntos, fue hasta que lo liberaron que se dio cuenta que sí estaban en la misma casa de seguridad.

Martín Heredia, diputado federal denunció el sábado que Antonio Pineda, director de Conalep Rosario; Jesús Villagrana, director de Conalep Escuinapa, y Felipe Parada, habían sido privados de la libertad cerca de las 14:00 horas, horas más tarde en conferencia de prensa dio a conocer que fueron encontrados con vida, pero golpeados y con indicios de haber sido torturados.