Ciudad de México (MILENIO).– La Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (CETEG) y organizaciones del Movimiento Popular Guerrerense (MPG) respaldaron a padres de los 43 desaparecidos de la Normal Rural de Ayotzinapa, luego de que estos mandaran un mensaje a Santiago Mezari Hernández, presunto líder del grupo delictivo los Rojos, quien ofreció darles información sobre el paradero de sus hijos.
El martes, un grupo de padres de los 43 jóvenes normalistas desaparecidos viajó hasta Rancho del Cura, crucero que enlaza las carreteras que van hacia Iguala, Tepecoacuilco, Huitzuco de los Figueroa, Atenango y Copalillo.
Ahí, dejaron carteles en los que piden a Mazari Hernández que sugiera la manera en que pueden contactarse, con la intención de que les proporcione la información que tiene respecto al paradero de sus hijos, como ofreció hacerlo en febrero pasado.
El miércoles, Manuel Salvador Rosas Zúñiga, integrante de la Comisión Política de la CETEG reconoció que se trata de un tema sumamente delicado, por tratarse de una persona vinculada con el crimen organizado.
Sin embargo apuntó: “Nos sumamos a su decisión, entendemos que los padres de familia están en la desesperación, porque no hay ninguna autoridad que les dé la información que necesitan, mucho menos la verdad sobre los hechos ocurridos en Iguala, es obvio que ellos tienen que recurrir a todos los medios”.
El dirigente magisterial reconoció que ante la incertidumbre y la ausencia de resultados, “los padres tienen el derecho de recurrir a cualquier medio y cuentan con nuestro respaldo total”.
Efraín Torres Fierro, dirigente del Frente de Defensa Popular (FDP) y miembro del Movimiento Popular Guerrerense (MPG), reprochó que a seis meses de distancia la Procuraduría General de la República (PGR) no haya dado a conocer avances importantes, lo que ha motivado que los jefes de familia busquen alternativas que no reflejan más que desesperación.
Indicó que el FDP se sumó a las protestas de los padres agraviados desde que estas comenzaron, acompañaron algunos recorridos en Iguala, Cocula y los sitios en que posiblemente pudieron ir los jóvenes, constatando una y otra vez que solamente obtenían descalabros.
Por esa razón, dijo que ahora que los padres buscan otro tipo de fuentes de información, el Estado Mexicano debe asumir que la causa de ello no es más que la ineficacia mostrada durante los últimos seis meses.
De hecho, dijo que la PGR puso el mal ejemplo de buscar información en los delincuentes y darla como cierta, pues la versión de que los 43 jóvenes fueron incinerados en un tiradero de basura la obtuvieron en el testimonio de varios de los presuntos sicarios implicados.