Luego de la incursión del ejército iraquí a las cercanías de Mosul, el Estado Islámico ha quemado 19 pozos petroleros.
Los pozos se encuentran actualmente en llamas, creando una nube densa de humo, que llega a la ciudad y a comunidades cercanas, afectando la calidad del aire.
De acuerdo a medios, los hechos se han registrado luego que el EI sintiera la presión del avance de las tropas de Irák y del grupo kurdo Peshmerga, que buscan recuperar el control de Mosul, que ha estado bajo el control del grupo extremista, desde 2014.
Se cree que EI todavía tiene el control de otros seis pozos petroleros.
En dicha ciudad, el Estado Islámico también asesinó a jóvenes dentro de una escuela, cuando arribaron las tropas opositoras.