La Clínica Hospital Culiacán después de la tormenta vive en un susurro. El vestíbulo está “escueto”. Solo un empleado de una vidriera toma medidas para remplazar la hoja de cristal de la puerta principal rota por las balas, y una empleada de limpieza asea el pasillo.
Es la tranquilidad después de la muerte.
Un hombre con un familiar hospitalizado suelta unas palabras descosidas de un rosario de muertes al interior de la clínica, insuficientes para armar un rompecabezas con tantas piezas sueltas de un tiroteo entre grupos antagónicos, protagonizada al interior de la clínica la noche del 28 de septiembre, en la que cuatro personas murieron.
“Mi hermano estaba a un lado del que buscaban…” dice.
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Una visita momentánea de una patrulla de la policía municipal rompe la atmósfera de “cotidianidad” de la clínica.
“Los balazos están adentro”, agrega el familiar del interno, “en una pared hay como unos quince”.
El personal médico susurra la desgracia. Y a la memoria acuden las imágenes del urgenciólogo abatido en el pasillo principal. Víctima del fuego cruzado al interior de su clínica, en su lugar y hora equivocados.
Otniel Everardo Montoya en su edad de Cristo, víctima colateral de rencillas ajenas.
El familiar del interno, cruzado de brazos, revive sus recuerdos frescos…
“Estuvo feo…” susurra.
El urgenciólogo
En su cuenta de Facebook los comentarios ofrecen más piezas del rompecabezas para armar la vida Otniel Everardo Montoya.
De reciente incorporación a la medicina privada, el galeno prestaba servicios como urgenciólogo en la clínica del IMSS de Salvador Alvarado, y entre semana, en la clínica hospital Culiacán. En el mero centro de la ciudad.
El originario de La Esperanza, Angostura, con su muerte deja una esposa y dos hijas en orfandad.
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El reclamo
La Sociedad Sinaloense de Especialistas en Medicina de Emergencias (SSIME, AC) postea en el muro del urgenciólogo abatido, un reclamo de justicia.
“La SSIME AC lamenta la pérdida de nuestro colega y amigo Dr. Otniel Everardo Montoya Médico Urgenciólogo y gran persona. Víctima de hechos violentos durante su labor como médico. Exigimos justicia a las autoridades y nos pronunciamos ante la inseguridad que vivimos la comunidad médica”.