Heidy Valeria, de 2 años, murió luego comer una galleta envenenada que encontró en su patio, luego de que una persona la arrojara con la intención de envenenar a su perro por que ladraba mucho, en Tototlán, Jalisco.

El hecho ocurrió el pasado 1 de febrero, en la colonia Teodosio R. Guevara, en el municipio de Tototlán, cuando Valeria y su vecina de seis años se encontraban jugando en un domicilio, y encontraron la galleta envenenada; ambas la consumieron.

La pequeña comenzó a sentirse mal, por lo que su mamá la trasladó a la Unidad Municipal de Protección Civil, en donde le aplicaron los protocolos por intoxicación.

El presidente municipal, Juan Carlos Vázquez Coyul, lamentó lo sucedido y dio a conocer el tipo de atención que se le brindó a la criatura: “Por desgracia, la pronta acción de Protección Civil al momento de ejecutar el protocolo de atención, no fue suficiente; en el traslado al hospital en dos ocasiones la pequeña fue sacada de paro”.

Tras dos días hospitalizada en el Hospital de Zona número 6, el jueves 3 de febrero, la menor falleció; mientras su vecina continúa luchando para permanecer viva.

Vázquez Coyul, agregó que la Comisaría de Seguridad Pública y Tránsito de Tototlán no tiene reporte sobre algún envenenamiento de caninos.

Para dar con la persona que arrojó la galleta envenenada, la Fiscalía Regional ya inició una carpeta de investigación.

Este fin de semana usuario de redes sociales difundieron el caso y pidieron justicia para Valeria.