Por los “actos de barbarie” cometidos contra el pueblo de Navolato y su persona, el regidor Guadalupe Santana Palma buscó la intervención del poder legislativo para fincarle responsabilidades al alcalde Miguel Ángel Calderón Quevedo.
El edil fue arrastrado por el lodo por agentes de la policía municipal de Navolato, cuando participaba en una manifestación contra la demolición del kiosko y la plazuela.
“Ni siquiera a un animal estamos autorizados a arrastrarlo y dañarlo”, expresó.
En diversas intervenciones en tribuna los legisladores expresaron su solidaridad y respaldo al regidor navolatense.
El regidor priísta de Navolato, Rigoberto Valenzuela, demandó la apertura de una investigación sobre la polémica renovación de la Plazuela Vicente Guerrero, ubicada en la cabecera de Navolato.
“Nuestra sociedad es diversa y plural. Tratemos todos por igual con dignidad, tolerancia y consideración. El respeto a la diversidad tiene que ser la base de nuestra convivencia social”.
Los legisladores de los diversos grupos parlamentarios repudiaran la forma en que fue tratado el regidor y cuestionaron la decisiones del alcalde para enfrentar a quienes se oponen a la remodelación.
La elaboración de un punto de acuerdo, la solicitud de una disculpa pública, la apertura de una investigación fue planteada en tribuna, pero no se llegó a una postura sobre el particular.
En entrevista el regidor informó que ya presentó ante la Agencia del Ministerio Público de Navolato una denuncia por amenazas de muerte y abuso de autoridad contra el alcalde Miguel Enrique Calderón Quevedo y el secretario del Ayuntamiento, Héctor Adrián Murrillo Leyva.
