Ay que bonito paseo del Centenario
Ay que bonita también su catedral
Aquí hasta un pobre se siente millonario
Aquí la vida se pasa sin llorar…
En 1910, Don Jorge G. Claussen, miembro renombrado de la comunidad de alemanes avecindados en Mazatlán, llegó al puerto para trabajar como socio-gerente en la Casa Melchers y se arraigó. Durante la celebración del centésimo aniversario del inicio de la guerra de Independencia nacional, en 1910, Don Jorge presidió la Junta de Mejoras para la ciudad, diseñando, trazando y construyendo varias obras de ornato urbano que aún perduran, como los Paseos Centenario y Claussen.
Fuente: Guía Histórica de Mazatlán, Tomo I, compilación de Aristeo Herrera y Cairo Yaraguán.