José Domingo Vázquez va por la anulación del resultado electoral que favoreció la reelección de Gerardo Vargas
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La elección en Ahome aún no termina, pues el aparentemente derrotado, José Domingo Vázquez Márquez, impugnó el dictamen del Consejo Municipal Electoral que le dio el gane a Gerardo Octavio Vargas Landeros, tras recontar las actas de escrutinio de 367 casillas electorales.
Mingo Vázquez, a una hora de vencer el término para la impugnación, a las 23:00 horas del pasado lunes, se presentó a las oficinas del árbitro electoral y presentó dos recursos: la inconformidad o impugnación del resultado electoral decretado por el Consejo y el juicio de Protección de Derechos de Políticos Electorales.
Carlos Jesús Patiño Cabanillas, representante legal de Vázquez, explicó que se trata de dos casos separados que llevan el único fin de anular el resultado de la elección concluida en la entrega de la constancia de mayoría relativa al candidato oficial.
“Los alegatos son bastantes y todos están dentro de las siete causales para anular el resultado. Se documentaron coacciones, compra de votos, acarreos de electores y muchos casos más. Todos concluyen en causales de irregularidades que tienen bastos fundamentos jurídicos, pero se busca que se respete el voto del ciudadano, invalidar las determinaciones del consejo y revertir los actos (el acta de mayoría relativa)”, dijo momentos después de impugnar la elección.
Luis Felipe Bernal Hernández, presidente del CME, mencionó que ambas peticiones serían turnadas al Tribunal Electoral del Estado de Sinaloa para que se pronuncien, pues no tienen investidura para resolverlos.
Luego de esto, la comitiva de Vázquez Márquez abandonó las instalaciones y se reunió con sus seguidores que aguantaron de pie dos horas al arribo de su líder. Cuando este arribó, lanzaron consignas de repudio a Vargas Landeros y vítores a Mingo. Este entró al recinto con una salva de aplausos y bajo el grito “¡Presidente! ¡Presidente! ¡Presidente!”.
Una vez en el exterior, Vázquez Márquez reiteró sus dichos: que esta había sido una elección de Estado, en donde los actores políticos como funcionarios actuaron a favor de su jefe, el espurio alcalde, y que este utilizó toda clase de ilegalidades y marrullerías para torcer la voluntad de la población, desde la coacción de los beneficiarios de programas sociales, compra de votos a granel, acarreo de electores, embarazo de urnas, falsificación de actas de escrutinio y hasta la utilización de documentación ilegal por pertenecer a otra demarcación. “Con este acto, cumplimos la palabra, hasta vencer; nada nos detendrá para anular las ilegalidades que el espurio está acostumbrado a cometer, nada ni nadie nos hará temblar, continuaremos hasta las últimas consecuencias”, arengó desde la escalinata.
Vázquez aseguró que su andar es tranquilo y está confiado en el equipo legal que realizó un trabajo excepcional para acreditar las causales de nulidad.
Además, consideró que los órganos electorales aún tienen un voto de confianza en la imparcialidad y la justicia. “Sin embargo, en Sinaloa puede ocurrir cualquier cosa, pues el gobierno es capaz de todo por arrebatar un triunfo ganado en las urnas. Pero de todos es sabido que, aunque aquí le diera el gane al espurio, todavía hay dos instancias más, que es en donde seguramente se definirá esta elección”.
Gerardo Octavio Vargas Landeros no se refirió al caso en específico, pero aseguró que tendrá un acercamiento con todos los opositores, pues llegó el momento de darle vuelta a la elección. “Haré un recorrido de agradecimiento por todo el municipio, antes de regresar a la Presidencia. Allí tendré una operación cicatriz, pero que no le rasquen porque se vuelve a abrir”, dijo fijando su territorio. En esa ocasión, él ya había recibido la constancia que lo acredita como alcalde.
Posteriormente se acercó a la Presidencia Municipal para reclamar el asiento que momentáneamente dejó. Este lo ocupará el 5 de julio, cuando se declare su retorno por el cabildo.
Afirmó que en la víspera tomará un descanso y posteriormente evaluará a su gabinete, pues durante los 45 días de campaña detectó que algunos bajaron el rendimiento.
Tras los hechos, los dirigentes de los partidos que conformaron la coalición Fuerza y Corazón por Sinaloa cayeron en un estupor, se refugiaron en sus oficinas y no manifestaron reclamo.
Vargas Landeros encabezó jolgorios a puerta cerrada, festejando su triunfo. Con su equipo entró en comilona, festinando a los rivales, incluso, algunos se mofaron de la división que generó la contienda electoral, gozando de que el presidente les dará infierno en el trienio que viene.
Artículo publicado el 16 de junio de 2024 en la edición 1116 del semanario Ríodoce.
