El cineasta muestra a la ciudad surrealista, en una película
En 2007 Mario Alberto Siordia popularizó la vida en una ciudad surrealista en la serie: Un día en Culiacán. A 17 años de distancia esta idea se convirtió en película.
A través de la historia de un soldado que ha caído en coma, luego de participar en un enfrentamiento en contra del MM, uno de los más grandes criminales de la zona.
La historia retrata cómo al despertar, descubre que su esposa está con dicho criminal. Además, su hijo forma parte del crimen organizado, como lugarteniente y mano derecha de su enemigo.
Ante tanta corrupción, el soldado no puede hacer su trabajo de manera legal y entonces se presenta a ese otro mundo culichi; el violento, el de la ilegalidad.
En más de una hora, el cineasta entremezcla las creencias religiosas, sobre todo la de Malverde, con aquello que rompe con el paradigma de las ciudades “normales”.
“Aquí se muestra al Culiacán surrealista, porque, aunque tenemos personas muy capacitadas que viven de manera normal, por el otro lado tenemos otra cara”, señaló.
“Esta ciudad que presentamos parece sacada de una obra literaria, una obra negra, que realmente rompe con todo lo que te puedas imaginar”.
Contarlo con humor
Esta película grabada enteramente en Culiacán, dijo que no hace apología de la violencia. Desde el origen de la humanidad, la comedia ha servido como catarsis y ese es el medio que le ha interesado trabajar.
Considera que es necesario contar la realidad, porque no se tiene que ocultar, pero no de una manera dolorosa. Lo que se vive, es una herida abierta.
“Yo no contaría esta historia de manera seria, esta es una comedia, humor negro, porque nos sirve como catarsis. El humor no te permite hacer apología de la violencia”.
“Me ha costado durante muchos años trabajar estos temas, desde que hicimos la mini serie: Un día en Culiacán, que nos cuenta cómo no le puedes pitar a los carros o reclamarle a ciertos vecinos”.
Para hacer esta película, Siordia contó que había una buena historia que contar y aunque no se le abrieron muchas puertas, lograron concluirla.
En esta cinta dijo que participan los actores Armando Hernández, Lourdes Palazuelos, Efraín Félix, Francisco Estrada, Sabdy Contreras, Tony Gárces, Arturo Díaz de Sandy, Claudio Trejo, Karla Lim y Emilia Vizcarra.
La realidad que no le gusta
El cineasta señaló que después de tres años de grabación y producción, se está ante una película que a los gobernantes no les va a gustar.
“Lo único que queríamos era contar una buena historia, que la gente entre a una sala de cine, se divierta y reflexione. Es un trabajo que costó mucho esfuerzo. Para lograrla nos batearon de muchos lados, pero aquí estamos”, detalló.
El director consideró a esta película como un parteaguas para el arte y la cultura en el estado. Es primera en su tipo, con participación en su producción completamente sinaloense y que además pretende proyectarse en la región noroeste por Cinemex.
Artículo publicado el 14 de abril de 2024 en la edición 1107 del semanario Ríodoce.
