El torneo Clausura 2014 de la Primera División, la llamada Liga MX, ya inició y no hay mucho qué destacar.
Muchos equipos barajaron nombres de grandes figuras para este torneo, pero no, esos grandes nombres o sonadas contrataciones quedaron para mejor ocasión.
La prueba está en que ninguno de los 18 clubes logró reforzarse con algún elemento que rompiera el mercado y sus apuestas estuvieron dirigidas a jugadores que buscarán hacerse de un currículo en la Liga Mexicana.
Así que la chequera que sacaron los equipos no fue tan rimbombante.
Por ejemplo, Pachuca se reforzó con Enner Valencia y John Pajoy; Atlante con Salustino Candia y Cristian Sosa o Monterrey con Víctor Ramos y Wilson Morelo. Esos son algunos ejemplos que demuestran que los refuerzos extranjeros estarán siendo evaluados y sin ninguna garantía de lo que han hecho anteriormente.
E incluso América, Cruz Azul y Tigres tampoco gastaron sus recursos y apostaron por nombres que no han explotado a nivel internacional.
En el caso de los técnicos, habrá algunas novedades, pero aclaro, ya conocidos en el futbol mexicano, a excepción de César Farías, quien llega del extranjero.
Pero José Luis el Güero Real vuelve a las Chivas, al igual que Tomás Boy, que volvió a los Rojinegros del Atlas tras seis meses de divorcio.
Lo que sí está por verse es que algunos elementos ya con experiencia, buscarán renacer, ya que por diferentes situaciones han quedado a deber, aunque para otros le ha afectado la vida social.
En la lista aparecen Marco Fabián, Humberto Suazo, Lucas Lobos y Christian Giménez, además de Atlante, Atlas, Chivas y Pumas en lo colectivo son algunos de los llamados a resurgir después de meses en los que se vieron en el fondo de la tabla.
Por lo tanto, en estos seis meses no habrá, en mi punto de vista algo que llame la atención, habrá más de lo mismo.