Seguramente has escuchado o leído que el extinto y famoso ex scout de los Dodgers, Mike Brito, participó como actor en algunas películas del cine mexicano en los 80’s, mejor conocidas como Las Ficheras.
Brito amaba tanto a México como ahora lo grita a los cuatro vientos su compatriota Randy Arozarena, con la diferencia de que el hombre del sombrero y los puros nunca buscó la doble nacionalidad.
Sin embargo, hay otro excéntrico pelotero caribeño que después de debutar en la Liga Mexicana, incursionó con gran éxito en el cine de este país: El dominicano Julio César Ímbert.
El nativo de quisqueya fue un buen pitcher zurdo en su breve paso por la Liga Invernal Dominicana y debutó en la LMB con los Diablos Rojos en 1962, donde lanzó 10 años hasta que se retiró con Yucatán, destacando su temporada de 1969 con Leones y El Águila de Veracruz: 24-8 y 1.70 de ERA.
Para 1974 ya estaba retirado del beisbol al ser llamado por su compatriota Andrés García para filmar la película ‘La Amargura de Mi Raza’.
En una ocasión le preguntaron a Ímbert el por qué se había alejado del beisbol para incursionar en el cine.
“No quise recibir más jonrones de Héctor Espino y mejor me fui abrazar las actrices”, expresó Julio entre serio y broma.
POLIFACÉTICO….Ímbert, actualmente de 83 años de edad, también destacó en algunas telenovelas al lado de Ivonne de Carlo, Verónica Castro, Lupita D’Alessio, Susana Dosamantes, Angélica María, Libertad Lamarque, Lucía Méndez, por citar solo algunas actrices de fama nacional e internacional.
Conocido en el medio artístico como el «moreno de ojos verdes», Imbert llegó a figurar más que en el beisbol, pero nunca dejó de mantener sus contactos con directivos y peloteros de la LMB.
Eso le permitió regresar al beisbol profesional en otras facetas.
En el año 2006 fue Gerente de los Olmecas de Tabasco y para la edición 2008-09 de la LMP, Ímbert fue coach de pitcheo de los Yaquis de Cd. Obregón.
Se quedó a vivir en la Ciudad de México y desde la capital se convirtió en uno de los mejores scouts de los Diablos Rojos, el equipo que le abrió las puertas para trabajar en este país hace 60 años.
Así fue como en el año 2010, durante el Nacional 13-14 años en Lagos de Moreno, Jalisco, Ímbert vio por primera vez a su tocayo Julio César (Urías) y envió un reporte a los Diablos Rojos para que lo firmaran, lo cual hicieron dos años después antes de negociarlo a los Dodgers en 2013.
Sin embargo, en medio de la pandemia hace dos años, Ímbert fue despedido junto a varios scouts de la organización ‘escarlata’.
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Bonds, el mejor de la historia
¿Por qué Barry Bonds no terminó con más de mil jonrones en su carrera?
Sencillo: No le lanzaron durante gran parte de su trayectoria.
Bonds se retiró del beisbol en el año 2007 con la friolera de 688 bases intencionales, es decir, más del doble de las que recibió su más cercano, el dominicano Albert Pujols.
Vean el Top Ten de la historia:
- Barry Bonds 688
- Albert Pujols 316
- Stan Musial 298
- Hank Aaron 293
- Willie McCovey 260
- Ted Williams 258
- Vladimir Guerrero 250
- Ken Griffey Jr. 246
- Miguel Cabrera 238
- George Brett 229
Además de quitarle el bate en automático –688 veces–, Bonds recibió 2 mil 558 bases por bolas y 106 por golpe para un total de 3 mil 352 transferencias en 12 mil 606 veces al bate (el 26 por ciento).
Bonds conectaba un jonrón cada 11.76 veces al bate –el segundo mejor de la historia–, de tal forma que sin esos 3 mil 352 pasaportes habría pegado otros 277 bambinazos.
Y si eso lo añadimos a sus 762 HR, suman 1 mil 039 cuadrangulares.
En ninguna otra ecuación, ningún otro bateador tendría más del millar de jonrones.
¿Ahora ya comprenden por qué Barry Bonds es el mejor bateador de todos los tiempos?
Artículo publicado el 23 de julio de 2023 en la edición 1069 del semanario Ríodoce.
