El presidente no se cansa, pero sí se enferma; día tras día afirma y reafirma que su gobierno proporcionará a los mexicanos un sistema de salud como el de Dinamarca.
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El país escandinavo, en mención, que apenas tiene unos seis millones de habitantes, ocupa el tercer lugar mundial por la calidad, cobertura y eficiencia de sus servicios de salud. Le destina el 11 de su PIB por habitante, con ello, y sin corrupción, proporcionan servicio médico completo, sin todo el medicamento, odontología hasta los 18 años, y 2/5 partes del costo de los servicios de fisioterapia y podología al 90 por ciento de los daneses (El otro 10 por ciento utiliza la medicina privada) y a los extranjeros que se encuentren legalmente en ese país.
Todo es posible porque se trata de un sistema 100 por ciento público, con una planeación centralizada, gratuita y universal, enfocada en la medicina preventiva y en la seguridad como derecho universal.
“No será como en Dinamarca, va a ser mejor” reitero el presidenteel 28 de abril de este año. Y para conseguirlo, da pasos agigantados y no se tienta el corazón.
Primero. Es obvio y evidente que la situación catastrófica en que dejaron los gobiernos anteriores al sector salud público, no se resolverá en seis años, menos en año y medio que restan al sexenio de AMLO. Son demasiados los cambios que se requieren para lograrlo, pero, aparte de la decisión ya tomada, se ven acciones y hechos que reorientan recursos, y ajustes y reajustes de fondo.
Acciones más relevantes:
Asegurar la compra de los medicamentos que se requieren para los próximos dos años, ya hay recursos etiquetados, (Esto, a pesar de que hay, aún, 45 millones de recetas sin surtir en lo que va del sexenio).
Tan solo en 2021 en este rubro se ahorraron 18 mil 919 millones de pesos.
La inversión en el sector aumenta año tras año; de 2.68 por ciento en 2019, a 3.3 por ciento del PIB en 2020.
En 2023 los recursos para salud aumentaron un 73 por ciento en términos reales, 30 mil 498 millones de pesos, el mayor de la última década. El IMSS incrementó un 11.7 por ciento, el ISSSTE 7.2 por ciento y la Secretaría de Salud, 4.7 por ciento.
La escasez de personal hospitalario que hizo crisis, se resuelve con diversos programas; contrato de médicos especialistas de Cuba, —habrá 1 mil 200; contratación generalizada de médicos generales y especialistas con salarios mucho mejores, basificación a personal médico, de enfermería y otros puestos en todo el sistema, y habrá un mayor aumento con el programa de contratación de médicos especialistas jubilados del ISSSTE, que trabajaran con los mismos salarios que tiene el personal activo.
El presupuesto destinado a la nómina en la Secretaría de Salud, del 2020 al 2021, aumentó 25.2 por ciento, y se crearon unas 12 mil nuevas plazas.
Cierto; para diciembre de 2024, es muy probable que no estará operando un sistema igual o mejor que el de Dinamarca, pero, sin duda, y apostamos a ello, se están sentando las bases para conseguirlo en poco tiempo más. Otra acción es el paso del INSABI al IMSS Bienestar; la combinación de este programa con la transformación a fondo del IMSS, ISSSTE y de los otros sistemas públicos de salud, permitirán a los mexicanos acceder a un nuevo sistema de salud 100 por ciento público, (mejor que el de Dinamarca, porque considera que todos los medicamentos sean gratuitos), universal y eficiente, como todos merecemos.
Artículo publicado el 07 de mayo de 2023 en la edición 1058 del semanario Ríodoce.
