Juan Francisco López Orduño, jefe de la Dirección de Trabajo y Previsión Social zona norte de Sinaloa, señala que la tarea de regularizar las cuarterías o albergues fue a destiempo
Los horticultores pretenden evadir su responsabilidad social con los jornaleros que laboran en sus campos, subcontratando a transportistas para que suscriban acuerdos con los trabajadores, lo que no los exime de responsabilidad, afirmó Juan Francisco López Orduño, jefe de la Dirección de Trabajo y Previsión Social zona norte de Sinaloa.
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“Ante la Ley Federal del Trabajo ellos también son patrones porque dan órdenes y trabajan en sus predios, además de que pagan un servicio prestado, aunque nunca hubiesen tenido contacto con los trabajadores, la pretendida evasión de responsabilidad con el argumento de que no tienen relación con los jornaleros, es real, pero inexacta. De cualquier forma, tendrán que cumplir con su responsabilidad en el próximo ciclo, porque el actual ya está por concluir, digamos, que en 15 días termina”, consideró.
Ante el fin de la recolección de cosechas a mano, la tarea de regularizar las cuarterías o los albergues fue a destiempo, pero de ninguna forma fue un trabajo perdido, pues la próxima temporada que iniciará en septiembre u octubre, llegará con los sitios de albergue identificados, aseguró.
Además, el siguiente arranque de la temporada da tiempo para buscar un decreto laboral que se expidió años atrás y con el cual permitía a los patrones registrar ante el IMSS a los trabajadores por días.
“Es de recordar aquellos tiempos en que los agricultores daban orden de atención a los jornaleros, cuando estos trabajaban tres días, una semana, una quincena en sus campos, porque la atención a la salud se requiere en el campo, en donde pueden sufrir un accidente, la picadura de un animal ponzoñoso, herirse, deshidratarse o cualquier otra cosa”, afirmó López Orduño.
Aquel decreto obligaba a los patrones a tener agua potable, letrinas y mínimamente un botiquín, recordó, servicios que ahora se pierden porque el contratista es el transportista, que es quien acuerda el traslado, el hospedaje, la alimentación y sueldos.
“Lo que se descubrió es que el transportista, sea de la localidad o de los pueblos de donde proceden los trabajadores, es quien contrata a su cuadrilla y este dispone del tiempo de estos y de las atenciones posteriores, lo que se refleja en cuartos insalubres, con hacinamiento de personas y demás problemas”, dijo.
López Orduño dijo que el problema de los jornaleros agrícolas no se da en un solo municipio sino que existe desde Mazatlán hasta Ahome, por lo que el estado deberá de crear una fuerza de tarea multiinstitucional en coordinación con los municipios, porque a estos últimos corresponden los servicios públicos y las aprobaciones de los permisos de construcción o la habilitación de sitios para vivienda, mientras que el estado deberá de modificar algunas leyes y reglamentos para que, por un ejemplo proporcionen actas de nacimiento a aquellos padres que no puedan acreditar la parentela. “Sí, es un problema porque no se puede registrar a un trabajador ante el Seguro Social con el solo dicho de que es hijo del empleado o porque dice llamarse de tal forma”.
Hasta ahora, el sector Salud ha dado cuenta de la muerte de cinco niños por complicaciones de salud asociadas a la precariedad y hacinamiento en que vivían en las cuarterías y de sus condiciones laborales, en Juan José Ríos. De estas, figuran diarreas y enfermedades de las vías respiratorias no atendidas.
De las condiciones de trabajo no existen denuncias de jornaleros hacia alguna autoridad por incumplimiento de prestaciones.
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En tanto, el alcalde de Guasave, Martín Ahumada Quintero, aseguró que el albergue municipal para jornaleros ya está habitable tras restaurarse, sin embargo, hasta el viernes, ningún trabajador había pedido ocuparlo, principalmente por problemas de transporte, situación que se deberá de negociar.
Este jueves, la Comisión de Defensa de los Derechos Humanos en Sinaloa visitó el albergue para atestiguar los cambios y los servicios que ofrece.
Sara Galaviz Navarro, visitadora en la zona norte y Joel Guadalupe Zavala Aispuro, visitador general, recorrieron las instalaciones y no encontraron detalles mayores de operatividad.
Pese a ello, nadie ha pedido ocuparlo.
Ahumada Quintero dijo que las brigadas aún se encuentran trabajando con los jornaleros, y se han atendido a más de 20 niños, 17 de los cuales ya se recuperaron; además dieron auxilio a mujeres embarazadas, entre estas dos con preeclampsia. Con apoyo de la SEBIDES entregaron también alimentos, catres, despensas, colchonetas, abanicos, kit de limpieza y atención médica general.
En tanto que el secretario de Salud de Sinaloa, Cuitláhuac González Galindo, reportó que tras la emergencia sanitaria en Juan José Ríos se detectaron 283 menores de edad, de los cuales, 87, de tres meses a un año de edad presentaron algún problema de salud derivado de las precarias condiciones de higiene en las que viven y, de los cuales se trasladaron de urgencia a 17.
A la par, se atendieron 204 mujeres, 13 de las cuales están embarazadas, 129 niñas, 154 niños, un adolescente y 291 hombres; se aplicaron más de 45 vacunas a igual número de infantes que no tenían el cuadro completo de inmunización y se brindó tratamiento preventivo antiparasitario a 25 niños y siete consultas de medicina general para igual número de adultos y una consulta de embarazo.
Según el informe, la atención no ha concluido.
Artículo publicado el 02 de abril de 2023 en la edición 1053 del semanario Ríodoce.
