El pasado 19 de mayo, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), declaró alerta sanitaria máxima para vapeadores (cigarrillos electrónicos) en todas sus modalidades por los riesgos que representan para la salud.

En el comunicado de riesgo se informó cómo la inhalación de un excipiente frecuentemente encontrado en dispositivos de vapeo denominado acetato de vitamina E, constituye un riesgo alto para la salud al tratarse de una sustancia tóxica que puede causar enfermedades respiratorias agudas e incluso la muerte.

El uso de vaporizadores surgió como una alternativa para dejar de fumar de la manera tradicional. En su momento, los vaporizadores eran percibidos como una opción sana y gradual para abatir el vicio por el tabaco, ya que funcionan con una base ‘muy natural’: el agua.

Pero todo esto se ha ido viniendo abajo a medida que la ciencia realiza estudios sobre sus efectos negativos para la salud.

Estudios mostraron daños a la salud años atrás

El Centro de Control y la Prevención de Enfermedades de EU (CDC, por sus siglas en inglés) publicó en febrero de 2020 un estudio en el que revela que hasta esa fecha habían sido notificados 2 mil 807 casos de pacientes con lesión pulmonar asociada al cigarrillo electrónico. Hasta esa misma fecha, se habían confirmado 68 muertes.

Los estudios recolectados por el CDC relacionaron directamente al acetato de vitamina E con la lesión pulmonar asociada al cigarrillo electrónico. Este aditivo fue encontrado en 48 de 51 pacientes con lesión por uso de vapeadores, pero no se encontró en muestras tomadas de personas sanas.

El acetato de vitamina E generalmente no causa daño cuando se ingiere como un suplemento vitamínico o se aplica a la piel. Sin embargo, las investigaciones anteriores parecen indicar que cuando el acetato de vitamina E se inhala, puede interferir en el funcionamiento normal de los pulmones.

Tras lo publicado, el CDC y la FDA recomendaron evitar el uso de vapeadores, especialmente los provenientes de mercados informales, familiares, amigos o vendedores en línea.

También recomendaron que los adultos que estuvieran usando productos de cigarrillos electrónicos o vapeo que contengan nicotina como alternativa a los cigarrillos regulares no deberían volver a fumar cigarrillos regulares.

Los productos de cigarrillos electrónicos o vapeo (que contengan nicotina o tetrahidrocannabinol) nunca deben ser usados por jóvenes, adultos jóvenes o mujeres embarazadas.

Los adultos que actualmente no usan productos de tabaco no deberían empezar a usar productos de cigarrillos electrónicos o vapeo.

Por decreto, prohibido en México

Posterior a la alerta sanitaria, el 31 de mayo, en el marco del Día Mundial Sin Tabaco, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, firmó un decreto con el que quedó prohibida la circulación y comercialización de cigarrillos electrónicos o vapeadores.

El decreto incluyó a dispositivos que utilicen o no nicotina, así como a las mezclas utilizadas para el relleno de los mismos para evitar que se “lesionen los derechos (a la salud) de terceros”.

La medida fue justificada por los estudios que han demostrado sus efectos nocivos en la salud, así como por las campañas publicitarias de las que son víctimas los jóvenes mexicanos.

Amparo en revisión

El juez Décimo Quinto en Materia Administrativa de la Ciudad de México aceptó (para su revisión) la demanda de la empresa nayarita Tabacos Desvenados que impugna el decreto presidencial firmado el 31 de mayo.

El juez no se pronunció sobre el dictamen a favor o en contra de la demanda, pero agendó el 22 de julio la celebración de la audiencia constitucional para emitir su respuesta.

Este es el principio de una “lluvia de amparos” que se prevén contra la tajante medida prohibitiva del presidente.

Cecilia Stahlhurt, especialista en temas regulatorios, ve el vaso medio vacío después de la medida. “Es un decreto mal fundamentado, hecho al vapor, el cual tiene básicamente artículos que no son claros”, comentó.

Algunos expertos opinan que la medida hace que la oferta se dé ahora desde el mercado negro, a través de redes sociales, como Facebook y no dentro del mercado formal, lo que afectaría la salud de las personas por un nulo control de calidad.

Artículo publicado el 19 de junio de 2022 en la edición 1012 del semanario Ríodoce.