El médico e historiador, Rafael Valdez Aguilar, reedita el libro ‘Epidemias en Sinaloa. Una aproximación histórica‘
Las epidemias y pandemias, han cambiado el curso de la historia. Han paralizado ejércitos, devastado regiones enteras, despoblado países e incluso continentes. Han arruinado entidades pujantes, terminado con civilizaciones florecientes y detenido, temporalmente obras de ingeniería.
Así lo muestra Rafael Valdez Aguilar en las 200 páginas que integran el libro: Epidemias en Sinaloa. Una aproximación histórica, publicado por primera vez en 1991 pero ahora aumentado con las pandemias de la influenza, COVID-19 en México y Sinaloa, así como tifus exantemático o tabardillo.
Para el médico e historiador, no son eventos nuevos, mucho menos fortuitos, incluso en la decadencia del Imperio Romano, se vivió una epidemia de paludismo que facilitó su caída frente a los bárbaros, al igual que la civilización maya con la fiebre amarilla.
En el país, la Conquista y la Colonización del territorio, que constituyó posteriormente la Nueva España fue en gran parte posible gracias al efecto desastroso de las epidemias traídas en su mayoría por los españoles, para las cuales los indígenas no tenían defensas biológicas.
La población de 20 millones se redujo a poco más de un millón. Pueblos enteros de la serranía de Sinaloa diezmaron, víctimas de la viruela, sarampión, cololixtli, aseguró.
A pesar de los años de distancia, Valdez Aguilar mencionó que ahí también se vivió el miedo, ese mismo que se siente ahora y que en algunos momentos las llevan a desestimar lo que se está viviendo.
“Las pandemias suceden alrededor de cada 50 años, esto abarca dos generaciones hay gente que no les toca pero han escuchado de ellas; están en los libros, en la música, en transmisión oral, pero existe la tendencia humana a negarlo por miedo, en medio de un desastre”, recordó.
“Hay gente que no cree y algunos después se mueren. El miedo a enfrentar la realidad, muchas veces por las distorsiones que se hacen, de tipo religioso, el mismo gobierno hace lo mismo por razones políticas, tiende a minimizar y a negar. No hay que negar que se vive una pandemia, en la que es muy trágico mirar cómo la gente se arrepiente de no vacunarse, lo que hay que hacer es prepararse, protegerse y enfrentar lo que viene”.
Pandemia moderna
Esta pandemia moderna, provocada por un virus relativamente nuevo, surgido a mediados de los 50 del siglo XX, pero que fue evolucionando, se originó sobre todo por tres motivos principales; el cambio climático, la explosión demográfica y la urbanización de animales silvestres.
“Somos ya casi 8 mil millones de humanos en la tierra, los espacios se reducen mucho, amen que los recursos naturales se están acabando, incluyendo el agua; todo esto se conjunta para que surja una pandemia, sin esto no es posible, hablo de pandemias modernas”, explicó.
“Es difícil hacer un pronóstico, ya lleva año y medio y no se le ve mucho que vaya a terminar, no es que se vaya a ir en algún momento, se queda, se hace crónico pero menos agresiva”.
Aunque no existe un medicamento que cure propiamente el COVID-19, Valdez Aguilar consideró como un triunfo el desarrollo de una vacuna en tiempo récord; recuérdese que la de la poliomielitis tardó 10 años y fue un triunfo tremendo.
Lo que deja la pandemia
Rafael Valdez Aguilar ha escrito una veintena de libros. El de Epidemias en Sinaloa…, no es de corte científico. Es un historiador que se sale del canon y humaniza sus textos.
Además de información sobre el COVID-19, el lector encontrará información sobre la viruela, el sarampión, cocolixtli, tifus epidémico o tabardillo, cólera, lepra, fiebre amarilla, peste bubónica, influenza, paludismo y sida.
Este libro publicado por Andraval Ediciones, que dirige Maritza López y con el apoyo económico del doctor Efraín Romo Santos, es una aportación y motivación para que se escriba más sobre el tema.
“Hay médicos que escriben pero sobre todo biografías o sobre la construcción de hospitales, pero de la historia de las enfermedades se ha hecho poco, la mayor parte de los médicos cumplen con su deber pero a quienes les interesa la historia es importante que lo hagan, pero de forma humanizada”.
“Esta pandemia está dando una gran lección a la humanidad, es tiempo de reflexión y de entender que es urgente valorar la vida y darle una mayor importancia al planeta; ser más empáticos con los otros, cuidar este hogar, que, si no tomamos conciencia, puede colapsar”.
Artículo publicado el 22 de agosto de 2021 en la edición 969 del semanario Ríodoce.
