Esperaremos una sentencia condenatoria y que se juzgue también al autor intelectual, dice Griselda Triana
En el juicio oral por el asesinato de Javier Valdez, la Feadle intentará demostrar que Juan Francisco “P”, fue quien cometió el crimen; y la defensa buscará acreditar que el acusado ese día no se encontraba en Culiacán sino en Tijuana.
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La semana pasada, el Juez de Control, Édgar Rafael Juárez Amador, dictó el auto de apertura a juicio oral al Quillo, después de que la audiencia se difirió en seis ocasiones desde diciembre 2018.
De acuerdo con la información que se dio a conocer durante la audiencia intermedia, la teoría de la Fiscalía es que el Quillo fue uno de los que disparó y la teoría de la defensa es que el acusado no estaba en la ciudad.
En el juicio declararán familiares del acusado, testigos, peritos, investigadores y presentarán peritajes, videos y fotografías.
La audiencia se celebró de manera virtual, con todos los participantes enlazados por videoconferencia, solo el Quillo, estaba en la sala de audiencias del Centro de Justicia Penal Federal de Culiacán, para evitar problemas técnicos con la conexión a internet.
El Juez de Control turnará el auto de apertura a un Tribunal de Enjuiciamiento para que programe la fecha de inicio del juicio oral, que de acuerdo con los abogados podría ser a inicios del próximo año.
En la acusación formal la Fiscalía pide una pena de 50 años de prisión por el delito de homicidio calificado con las agravantes de premeditación, ventaja y actividad periodística.
El Quillo renunció a su derecho a apegarse a un procedimiento abreviado. La Fiscalía ofreció una condena de 20 años ocho meses a cambio de que aceptara su responsabilidad pero la rechazó.
El otro imputado, Heriberto “P”, el Koala, aceptó un procedimiento abreviado el pasado 27 de febrero y fue sentenciado a 14 años ocho meses de prisión.
La Fiscalía asegura que el Koala era quien conducía el vehículo en el que circulaban; y quienes dispararon son el Quillo y Luis Idelfonso “S”, el Diablo, asesinado en Sonora en 2017.
Como autor intelectual acusan a Dámaso López Serrano, el Minilic, preso en una cárcel de Estados Unidos y con orden de aprehensión pendiente de ejecutar por el asesinato de Javier.
En la audiencia intermedia fueron admitidos por el Juez 49 medios probatorios entre testimoniales, periciales y documentales a favor de la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión; a la defensa 15, y a la asesoría jurídica cuatro medios probatorios.
Tanto por la Fiscalía como por la defensa acudirá a declarar un primo del Quillo.
El testigo de identidad reservada dijo a la Fiscalía que en una ocasión el Quillo y el Koala, lo invitaron a tomar a una zona conocida como La Lomita, en San Javier, San Ignacio.
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Ahí escuchó cuando el Quillo le dijo al Koala, “pues nos tuvimos que aventar un jale” y al preguntar de qué hablaban le dijeron que habían tenido que matar al periodista.
Según el testigo el Quillo le mostró una pistola con las imágenes de Damáso López Núñez, el Licenciado; y Dámaso López Serrano, el Minilic, en las cachas, y dijo que se la habían dado como pago por el asesinato del periodista a quien habían matado porque hizo una publicación que a la gente de Eldorado no le gustó.
También fue admitida por el Juez la declaración de una mujer, con identidad reservada, que era pareja sentimental del tercer involucrado en el homicidio, el Diablo, asesinado y calcinado en en San Luis Río Colorado.
La mujer hablará sobre una ocasión en la que el Diablo, después de un enfrentamiento, le dijo que necesitaba desahogarse porque quizás sería la última vez que se verían.
El Diablo, le confesó que él, el Quillo y el Koala, habían asesinado a Javier y le dijo que se quería ir del estado y operarse la cara y cambiar de nombre.
El testimonio de una persona que se encontraba en el lugar del crimen también fue admitido por el Juez.
Esta persona se encontraba trabajando en la calle Vicente Riva Palacio, cuando los sicarios, que viajaban en un Versa gris, cerraron el paso a Javier, quien viajaba en su automóvil Toyota Corolla.
Según el testigo, uno de los sicarios gritó “bájate a la verga” y luego dispararon.
En el juicio además declararán la esposa y la suegra del Quillo.
Con estos testimoniales, la defensa tratará de acreditar que el acusado no estaba en Culiacán el día del asesinato.
Según las familiares, en ese entonces ellos vivían en Tijuana, Baja California.
La defensa además llevará a declarar a un agente del Ministerio Público Federal y a dos policías de investigación.
El defensor también ofreció la declaración de una persona que declaró ante Feadle cuando se estaba integrando la carpeta de investigación y señalaba como responsables del homicidio a otras personas.
La Fiscalía ofreció la declaración de los agentes aprehensores del Koala pero no fueron admitidos por el Juez.
La Fiscalía presentará los videos de cámaras de vigilancia en los que se observan el automóvil Corolla de Javier y el Versa.
De acuerdo con la Feadle, después del asesinato el Diablo abordó el automóvil de Javier.
En la avenida Aquiles Serdán entre el bulevar Francisco I. Madero y la calle Cristóbal Colón, el Diablo chocó el automóvil de Javier y se bajó para subirse al Versa y fue captado por una cámara de vigilancia.
La Feadle también mostrará pruebas para acreditar que el Versa era propiedad de el Quillo.
Para la esposa de Javier, Griselda Triana, el dictado del auto de apertura a juicio oral es un paso importante en la búsqueda de justicia.
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“Fue hasta la séptima vez que por fin se pudo realizar, entonces sí es un paso, es un paso importante, sabemos que bueno lo que viene es una etapa más importante todavía que ésta, sí lo vemos como un avance significativo y ahora nos resta confiar en que la apertura del juicio no tarde tanto tiempo, que no vuelva a ocurrir nada anormal que pueda alargar el inicio del juicio”, dijo.
Señaló que con la culminación de la etapa intermedia del proceso penal se queda más tranquila y confiada en que se obtendrá una sentencia condenatoria.
Mencionó que para que se haga justicia todavía falta llevar a proceso penal al autor intelectual.
“Todavía no podemos hablar de justicia, es un avance, el momento en que yo pueda hablar de justicia va llegar cuando él o los autores intelectuales paguen y tengan una sentencia condenatoria, estos son apenas los primeros pasos; este caso, adelantándonos y pensando que este sujeto reciba una sentencia condenatoria, va ser un paso más en la justicia y justicia a media no es justicia”, indicó.
La asociación Propuesta Cívica en un comunicado señaló “nos congratulamos que después del indebido retraso que ha tenido el caso al fin haya tenido verificativo esta audiencia”.
Las organizaciones acompañantes de la familia de Javier Valdez durante el proceso penal, Propuesta Cívica y Reporteros sin Fronteras solicitaron al Poder Judicial de la Federación, dicte a la brevedad la fecha para que se lleve a cabo la audiencia de juicio oral.
Según las asociaciones, el Código Nacional de Procedimientos Penales en su artículo 349 señala que la audiencia de inicio del juicio deberá realizarse entre 20 y 60 días naturales a partir de la recepción del auto de apertura.
A la Feadle solicitaron asignar a su personal más capacitado para la preparación y desarrollo de este juicio y al Mecanismos para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas, continúe brindado las medidas necesarias de protección a las víctimas.
A la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas pidieron que continúe brindando las medidas de asistencia integral a los familiares de Javier Valdez y al Instituto de la Defensoría Pública Federal, se conduzca con el principio de lealtad que rige a esta institución.
Artículo publicado el 04 de octubre de 2020 en la edición 923 del semanario Ríodoce.
