La noche del viernes 28 de junio un comando rescató a tres presos mexicanos de una prisión de Caracas, Venezuela.

Dos de los rescatados son originarios de Sinaloa, según sus pasaportes, expedidos en Baja California.

Uno de ellos es Enrique Gastélum Inzunza, de 36 años, de Culiacán; y el otro es Jorge Pedro Alarcón Zamudio, de 41, de Concordia.

El tercer evadido es Luis Felipe Fiol, de 50 años, de quien solo se sabe que es mexicano.

Los tres eran pilotos presuntamente del Cártel de Sinaloa y fueron detenidos en noviembre de 2017 cuando pretendían cargar con cocaína una avioneta procedente de Sudamérica.

Los mexicanos estaban presos en el Centro de Formación del Hombre Nuevo “Simón Bolívar”, ubicado en el municipio de Libertador de Caracas.

Las autoridades venezolanas informaron de la fuga pero no la forma en la que ocurrió. Sin embargo se han difundido dos versiones.

La organización no gubernamental Una Ventana a la Libertad que promueve los derechos de las personas privadas de la libertad, dio a conocer que ocurrió alrededor de las 22:00 horas del viernes 28.

Según la ONG desde la parte externa un comando voló una de las paredes e ingresó con armas largas para ayudarlos a escapar.

Otra versión que se ha difundido en medios venezolanos señala que la noche del sábado tocaron la puerta del penal y uno de los custodios que salió fue amenazado por un hombre con un arma de fuego.

Otros hombres armados entraron al penal al trepar por un muro lateral del edificio y sometieron a los demás guardias que se encontraban en el lugar.

Los hombres armados salieron del reclusorio con los tres mexicanos y huyeron.

Tras la fuga las autoridades instalaron puntos de control en calles de los estados de Caracas, Vargas y Miranda, e iniciaron a revisar hoteles y pensiones.

El sábado, en su cuenta de Twitter la ministra de Asuntos Penitenciarios, Iris Varela, ofreció una recompensa a quien colabore en la captura de los mexicanos aunque no señaló el monto que ofrece.

“Daré recompensa a quien aporte pistas efectivas para la recaptura de los tres narcotraficantes mexicanos evadidos anoche”, escribió y difundió la imagen de los fugados.

El director del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, Douglas Rico, también solicitó proporcionar información sobre los evadidos.

“Cualquier información de estos hombres pueden informar de manera inmediata a la mensajería privada de mi red social Instagram, o a través del 08800SECUESTRO, 0800CICPC24”, tuiteó.

Los tres mexicanos junto con cuatro venezolanos fueron detenidos en el estado de Cojedes, en noviembre de 2017.

Información de la Oficina Nacional Antidrogas de Venezuela, indica que la aeronave provenía de Centroamérica con destino a Venezuela con intención de aterrizar en una pista clandestina y cargar cocaína para llevarla nuevamente a Centroamérica.

La aeronave es modelo Beechcraft King 200 con matrícula NOV247TT, la cual era falsa y estaba adherida al fuselaje.

“La acción oportuna de nuestros funcionarios evitó que se realizara esta operación de tráfico ilícito de drogas”, informaron.

La avioneta estaba escondida entre unos matorrales, en una zona llamada La Playita, en el municipio de Pao de San Juan Bautista, en el estado de Cojedes.

Las autoridades presumen que la aeronave sería abastecida con combustible con el fin de dirigirse a otra pista clandestina en la frontera con Colombia.

La aeronave no tenía los asientos y a un costado había 112 bidones para combustible de avión.

En el lugar fueron detenidos los tres mexicanos y los venezolanos José Figueredo Aquiles Lamas, Juan Antonio López Orellano, Carlos Eduardo Figueredo Franco y Judith Ramona Senior Ramírez.

Los detenidos tenían la misión de pilotear, abastecer y realizar el apoyo logístico a la aeronave en su ingreso a territorio venezolano.

Por la evasión, detuvieron al director y siete custodios del Ministerio del Poder Popular para el Servicio Penitenciario.

En la Sala de Flagrancia del Área Metropolitana de Caracas los imputaron por los delitos de evasión favorecida agravada y asociación.

Los delitos están contemplados en el Código Penal y Ley Orgánica contra la Delincuencia Organizada y Financiamiento al Terrorismo.

El tribunal dictó la medida privativa de libertad contra los ocho funcionarios.

Tenían antecedentes

Enrique Gastélum tenía antecedentes en México ya que fue detenido en octubre de 2010, en Cabo San Lucas, Baja California.

En ese entonces de 27 años, fue acusado por el delito de robo de vehículo con violencia cometido con arma de fuego por despojar un vehículo en Tijuana.

Fue detenido por agentes de la Policía Ministerial del Estado cuando circulaba en una camioneta Toyota con reporte de robo.

Enrique dijo a los agentes que había comprado la camioneta en 145 mil pesos.

Luis Enrique Fiol también ya había sido detenido pero en julio de 2014, en Honduras, junto con Juan Manuel Gutiérrez, originario de Sinaloa.

Ambos fueron capturados cuando pretendían salir del aeropuerto internacional Golosón de la ciudad de La Ceiba, en el departamento de Atlántida.

Fueron detenidos por el delito de actos preparatorios conducentes a la realización del tráfico ilícito de drogas.

Los mexicanos piloteaban una aeronave con matrícula N72RT con bandera de México que había ingresado procedente de Tapachula, Chiapas,  hicieron un aterrizaje en San Pedro Sula y posteriormente en la Ceiba.

A su arribo solicitaron a los oficiales permiso para realizar una prueba de motores en la pista y ahí, personas desconocidas en dos vehículos los ayudaron a cargar 24 bidones de combustible.

Un soldado que notó la maniobra alertó al cuerpo de seguridad y detuvieron a los dos mexicanos a quienes les hallaron 12 mil dólares escondidos entre sus ropas

Artículo publicado el 07 de julio de 2019 en la edición 858 del semanario Ríodoce.