Las cuentas no cuadran: están en números rojos y se salen de la normatividad gubernamental

Falta de esclarecimiento del destino de las retenciones hechas a trabajadores de la educación para un fondo de vivienda, gastos alejados del cumplimiento de la norma contable gubernamental, pensiones pagadas por encima de lo calculado, préstamos que no se pagan, son algunos de los hechos que encontró la Auditoría Superior del Estado (ASE) en el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores de la Educación del Estado de Sinaloa (ISSSTEESIN).

En opinión de la ASE, el ISSSTEESIN no cuenta con un control interno eficiente, ya que no proporciona una seguridad razonable en la eficiencia y eficacia de la operación, ni en la confiabilidad de la información.

El ISSSTEESIN está en la lupa de la fiscalización y tiene un plazo de cuatro semanas para comprobar que está limpio de irregularidades o deficiencias en sus finanzas en el ejercicio que comprende del 2011 al 2016.

La auditoría fue aplicada a petición de un Punto de Acuerdo emitido por el Congreso del Estado el 6 de junio de 2017, producto de la insistente demanda del grupo magisterial denominado “Somos Más que 53” —un brazo inconforme del SNTE 53— que denunció ante los diputados que existían irregularidades en la administración de ISSSTEESIN. Sus señalamientos estaban concentrados en dos puntos básicos: auditar a la institución por el destino del fondo de vivienda que les descuentan y la existencia de pensiones infladas.

Así ante la presunción de la existencia de hechos o conductas que estaban produciendo daños y perjuicios al ISSSTEESIN, la ASE realizó la auditoría financiera del 2011 al 2016 para revisar la aplicación de los recursos presupuestales, la entrega de las cuotas patronales, además de revisar el Fondo de Aportaciones para el Fortalecimiento de las Entidades Federativas.

Durante la visita de los auditores de la ASE, los directivos de ISSSTEESIN omitieron proporcionar las actas en las que se aprobaron los estados financieros de marzo a diciembre de 2013, los de enero a octubre de 2014; así como los de los meses de abril, mayo octubre, noviembre y diciembre del ejercicio 2015; y enero, febrero, junio, julio, agosto, septiembre, octubre, noviembre y diciembre de 2016.

Las primeras declaraciones de Emma Karina Millán Bueno, presidenta de la Comisión de Fiscalización, sobre los resultados de la auditoría específica al ISSSTEESIN, molestó a la dirigencia del SNTE 53, quienes en conferencia de prensa respondieron al día siguiente que se pretendía desacreditar al ISSSTEESIN y a la organización sindical con tintes políticos electorales.

La diputada de filiación priísta aclaró que no había afirmado que había fraude en el ISSSTEESIN, pero sostuvo que los resultados de la auditoría arrojaron un total de 63 pliegos de observaciones y 158 promociones de responsabilidad, además de señalar que será facultad de la ASE interponer la denuncia en caso de que se presuma la existencia de la comisión de un delito, sino se hacen las aclaraciones con la documentación necesaria dentro de los plazos legales.

Con base en datos de la Secretaría de Administración y Finanzas del Gobierno de Sinaloa, el ISSSTEESIN es uno de los entes que más cuesta al Estado. De 2005 al 2010 significó un gasto de 2 mil 90 millones de pesos, pero del 2011 al 2016 fueron 6 mil 135.6 millones de pesos, lo que significó un crecimiento de 194 por ciento del presupuesto destinado a esa institución.

El fondo de vivienda que no construyó casas

En la auditoría se encontró que en el 2012, el ISSSTEESIN recibió recursos por el orden de los 176 millones 787 mil pesos por concepto de aportación del 5 por ciento sobre el sueldo base de los trabajadores de la educación a su servicio para ser invertido en la construcción de vivienda, de los cuales 159 millones 115 mil 437 pesos fueron aportados por el Gobierno del Estado de Sinaloa, y 17 millones 672 mil 349 pesos por el Colegio de Bachilleres el Estado de Sinaloa, sin embargo en los registros contables no se identificó la aplicación de dicho recurso.

Frente las evidencias encontradas por los auditores, el director general del ISSSTEESIN, Jesús Ernesto Delgado Valverde, explicó mediante un oficio signado en enero de 2018 que el recurso fue aplicado al pago de nómina de jubilados y pensionados del Instituto, pero la ASE lo consideró una acción improcedente porque los recursos debiesen haber sido destinados para la construcción de vivienda, como lo señala el artículo 29 de la Ley que crea el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores de Educación del Estado de Sinaloa (ISSSTEESIN).

La misma anomalía de no identificar la aplicación del fondo de vivienda se repitió en los ingresos que este concepto obtuvo el ISSSTEESIN en 2013 por un total de 184 millones 965 mil 802 pesos; en 2014 por un total de 172 millones 960 mil pesos; en 2015 por 185 millones 155 mil 614 pesos, y en 2016 por un total de 204 millones 281 mil 433 pesos.

Pensiones generosas

La ASE realizó 168 cálculos de 150 jubilados y/o pensionados y encontró que el importe autorizado de pensión es superior al determinado, generándose 2 mil 058 pagos con diferencia superior al cálculo por un importe de 4 millones 439 mil pesos.

Óscar Octavio Beltrán Ruiz, quien es pensionado y fue director general del ISSSTEESIN en el periodo que se auditó, aparece en varios puntos de la auditoría por inconsistencias en su administración al frente en la institución.

El nombramiento de este funcionario fue la primera observación que hizo la ASE por considerar que contravino el marco legal. Desde el 2011 el funcionario fue considerado como personal de confianza, pero por contar con una jubilación activa ante el ISSSTEESIN desde el 17 de julio de 2007, tal situación laboral era incompatible.

En opinión de la ASE, el nombramiento debió analizar el perfil del funcionario, o bien optado por renunciar a su jubilación, ya que la solicitud de licencia no se encuentra contemplada dentro de la ley, o bien pudo optarse por nombrar a otra persona para el cargo.

En las observaciones de la ASE se registró el hecho que además del director general, el jefe del Departamento de Presupuesto y Contabilidad, y el jefe de Prestaciones, contaban con jubilación activa dentro del instituto. En total se encontraron 80 pagos por concepto de honorarios profesionales por un monto de un millón 606 mil pesos.

Se omitió además la minuta en cual se asiente que la Junta Directiva acordó otorgar compensaciones, las cuales solo se ampararon con recibos que no se encuentran firmados ni sellados con el visto bueno.

En total se realizaron, en 2012, un total de 170 pagos a 25 trabajadores por un importe global de un millón 370 mil pesos, solo amparados en una relación de compensación y vales de despensa otorgados a mandos medios y superiores.

Entre las inconsistencias registradas por la ASE, se detectó además que el director general del ISSSTEESIN cobró en un junio de 2012 un importe de 6 mil 400 pesos por trabajos de carrocería y pintura de un auto Toyotta Camry, que no está incluido en el inventario de vehículos oficiales.

Además el director general recibió en 2012, por concepto de renta una unidad motriz de su propiedad que utilizaba para el desempeño de sus funciones oficiales, un total de 28 mil pesos, pero no se anexó documentación del contrato que contuviera los requisitos fiscales y legales mínimos, así como las características del vehículo.

Los préstamos que no se cobran

Pese a la evidente falta de liquidez con que opera el ISSSTEESIN, la institución otorga préstamos a su personal administrativo y de tiendas ISSSTEESIN, jubilados y pensionados, personal del magisterio en activo, pero no realiza las gestiones de cobro para recuperar el saldo.

Pese a que la ley del ISSSTEESIN establece que los préstamos a corto plazo no deben rebasar los 18 meses, salvo un acuerdo especial de la Junta Directiva, en la primera revisión del año 2012, se encontraron casos de préstamos con una antigüedad entre cinco y 11 años, sin haberse registrado ningún descuento a montos que van de los 5 mil a 11 mil pesos.

Escenarios similares se encontraron en los préstamos para bienes de consumo duradero realizado por adquisiciones en tiendas ISSSTEESIN realizadas entre uno a 11 años, por compras individuales que van desde los 33 mil a los 81 mil pesos. En el 2012, al ISSSTEESIN este tipo de préstamos le representaron un total de 732 mil 255 pesos.

Para 2013 el escenario es similar, pero la ASE encontró ventas en tiendas ISSSTEESIN de bienes de consumo duradero realizadas a empleados de diversas dependencias de gobierno, ayuntamientos, juntas municipales de agua, organismos públicos y empresas privadas, mediante convenios realizados con la institución. La inconsistencia encontrada es que el ISSSTEESIN no realizó las gestiones de cobro de los préstamos otorgados.

Para la ASE, los registros contables en estos préstamos no son confiables porque la información no concuerda entre los saldos de las cuentas y los descuentos quincenales.

En el 2014, las cuentas en ISSSTEESIN por concepto de préstamos a corto plazo reflejó un saldo de 43 millones 128 mil pesos, pero la institución siguió sin realizar la acciones de cobro para recuperar el monto. Mientras, los préstamos de consumo duradero en tiendas ya rondaba en ese mismo año por 32 millones 627 mil pesos.

En el 2015 el ISSSTEESIN siguió sin realizar acciones de cobro por sus adeudos y se observó que existen empleados que no reflejan movimiento de recuperación, algunos con préstamos con un antigüedad de 8 a 14 años

Para el 2016, la cuenta de préstamos a corto plazo ya ascendía a 46 millones 216 mil pesos, los cuales serían descontados vía nómina, pero como el ISSSTEESIN no realiza tareas de cobro, existen empleados que no realizan aportaciones a sus adeudos

En total suman 947 millones 972 mil pesos que deben ser documentados por parte del ISSSTEESIN en un plazo de un mes, a partir de que la institución reciba la notificación de la auditoría realizada por la ASE, de no solventarse o aclararse, deberán reponerse los recursos económicos y/o sancionarse a los funcionarios involucrados.

LAS IRREGULARIDADES ENCONTRADAS POR AUDITORES
1.- En algunas pólizas omiten anexar cotizaciones de cuando menos tres proveedores.
3. Algunas cotizaciones anexas carecen de la firma del proveedor.
4. Existen actas de la Junta Directiva que carecen de firmas de algunos de sus integrantes.
5.- No cuentan con el Programa Anual de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios.
6.-Existen empleados que tienen adeudos con el Instituto por concepto de Préstamos a Corto Plazo y Préstamos a Bienes de Consumo Duradero, pero no se les realizan descuentos.

Artículo publicado el 22 de abril de 2018 en la edición 795 del semanario Ríodoce.