Muchas preguntas se han hecho entorno si Andrés Guardado debió de fallar el penal que les regaló el árbitro estadounidense Mark Geiger en el duelo de semifinales entre México y Panamá, que al final ganaron los aztecas por 2-1 en tiempos extras.
Para algunos, el Principito tenía que fallar la pena máxima, pero para otros no.
En mi punto de vista, Guardado debió de errar el penal, por varias cuestiones.
Primero que nada por dignidad. México, con su pobre futbol que ha mostrado, no merecía llegar a la final y menos con ayuda arbitral.
Otra, por vergüenza. Guardado sabía que no era penal. Él mismo lo dijo, por lo tanto, tenía que errarlo.
Sabemos que son profesionales, pero como tal, también tienen que ser honestos con ellos mismo.
Tras finalizar el juego, Andrés comentó que por un momento pensó en echarla para afuera, pero al final, sólo lo pensó.
El Principito si hubiera errado el penal, ya no como futbolista, sino como persona, habría ganado mucho.
Más allá de las portadas deportivas a nivel mundial, sino que mucho más de eso.
Pero no fue así. Al mexicano le falta mucha cultura y sobre todo dignidad.
Por ello, México está como está. Existe la corrupción a manos llenas. El futbol azteca es un negocio redondo, donde todos ganan.
Por lo menos en lo deportivo, Guardado tuvo en sus pies el cambiar un poco la honestidad del mexicano. Que si existen, pero no pasó.
Creo que los aficionados deberían de hacer conciencia. El futbol ya no es un espectáculo, desde hace años es un negocio.
El futbol está gracias a la afición y por ello, deben de tenerle respeto. No vendiéndoles ‘humo’ como lo está haciendo la Selección Mexicana.
Pero bueno, ahora sólo queda esperar, a ver qué dice la Concacaf, aunque ya sabemos que nada.
EL PIOJO: Voy hacer claro y directo, aunque a muchos no les guste. Independientemente del resultado de hoy domingo entre México y Jamaica en la final, el Piojo Miguel Herrera, por dignidad, debe de renunciar.
Creo que Herrera ya no tiene por qué seguir al frente de la selección, que mejor se vaya hacer comerciales.
Además es evidente que hay jugadores que ya no quieren al Piojo. Prueba de ello es el pobre desempeño que han tenido, pero en fin, hay que esperar el final de esta Copa Oro.
