En 2024, el desarrollo de una ciudad está directamente ligado a su capacidad de adaptarse a la modernidad.

Las ciudades, cuerpos de piedra y mezcla, con avenidas como arterias y cámaras como ojos que todo lo vigilan, constan ya de inteligencia también. Esta capacidad “intelectual” es medida y directamente relacionada con el desarrollo.

La entrega de 2024 del ranking del índice IESE Cities In Motion publicó evaluación del nivel de desarrollo de 183 ciudades en 92 países del mundo. Se analizaron 114 indicadores que miden el progreso de estas localidades.

La innovación y priorización de los aspectos más importantes para el futuro de las ciudades requiere del desarrollo previo de un proceso de planificación estratégica, en especial en la actualidad.

El índice mide el panorama urbano—movilidad, transporte y planeación— y económico, pero también la capacidad de una ciudad para convertirse en inteligente y sostenible.

Las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) representan un pilar fundamental en la estructura de las ciudades contemporáneas, y resultan esenciales para que una sociedad pueda aspirar a ser reconocida como inteligente.

Los resultados

De las 183 ciudades en el ranking, solo 27 se encuentran en Latinoamérica, el 15 por ciento. La ciudad mejor posicionada de AL es Santiago de Chile, en la posición 91, en la categoría de desempeño medio con 49.96 de 100 puntos posibles. Le sigue Buenos Aires, Argentina, con 43.67 puntos y Montevideo, Uruguay con 40.78 puntos, ambas ya en la categoría de desempeño bajo.

La Ciudad de México aparece en el cuarto sitio de América Latina, en la misma categoría de desempeño bajo con 40.72 unidades; es la única ciudad del país que aparece rankeada.

El grupo de desempeño bajo en el que se sitúa la CDMX es con ciudades de oriente medio, África y el resto de las ciudades de Latinoamérica.

Los indicadores en los que la Ciudad de México tuvo mejor desempeño fueron: capital humano, proyección urbana y proyección internacional. Sus peores calificaciones se dieron en medioambiente, tecnología y movilidad y transporte.

Sobre los resultados de AL, el estudio justificó que “Dada la alta densidad urbana de América Latina, las metrópolis afrontan retos globales de magnitud creciente, comunes a la mayoría de ellas. Estos desafíos se han intensificado debido a la crisis internacional originada por conflictos armados, que afectan directamente a los países latinoamericanos y exacerban los problemas preexistentes”.

Un punto esperanzador para la CDMX es que el índice la sitúa en el cuadrante de ciudades con potencial ya que, a pesar de situarse actualmente en la zona media-baja del índice, evolucionan positivamente y con gran rapidez.

Artículo publicado el 28 de julio de 2024 en la edición 1122 del semanario Ríodoce.